Después de varios meses sin brindar conciertos en vivo, Adele regresó al escenario en una noche muy especial y lo hizo dando un mega recital en el London BST Hyde Park frente a más de 65 mil personas.
La cantautora británica contó con la presencia de dos personas muy especiales para ella: su exesposo, Simon Konecki y su actual pareja, Rich Paul, quienes se encontraban como asistentes en su concierto.
El empresario y el agente deportivo se sentaron uno al lado del otro en un área VIP del teatro donde fueron vistos charlando en compañía del hijo de la cantante, Angelo, de nueve años. Cameron Diaz, y el comediante James Corden (junto a su esposa, Julia Carey) fueron también de la partida.
La intérprete de "Hello" subió al escenario con un espectacular vestido de Louis Vuitton personalizado y diseñado por Jamie Mizrahi que -por ahora- no se encuentra a la venta para el público en general.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando la cantante se conmovió hasta las lágrimas mientras interpretaba "Someone like you" y sus fans coreaban la canción.
"Dios mío, estoy de vuelta en casa. Esta extraño estar frente a una multitud de nuevo. Me pongo muy nerviosa antes de cada show pero me encanta estar aquí", dijo.
