Benjamín Vicuña se encuentra en plena presentación de su libro dedicado a Blanca, su hija fallecida en 2012 fruto de su ex relación con Pampita. Por esta razón, fue invitado al programa chileno "Buenas noches a todos", donde abrió su corazón y recordó el momento más doloroso de su vida.
"Era una necesidad (hacer este libro) que tenía que ver con compartir algo que cambió y transformó mi vida. Yo sé lo necesario y lo que será para miles de personas que atraviesan un duelo", expresó.
Y agregó: "Fui acomodando un dolor inexplicable de forma natural, primero con una negación absoluta y luego con aceptación después de un trabajo arduo. Quedó un libro honesto y un tributo con todo mi corazón a mi hija. Decidí de forma consciente abrazar la vida, el amor y la risa de mis hijos".
Luego, el conductor Edgardo Fuentes quiso saber: “En ese momento tú quedas muy golpeado, tu pareja queda golpeada y es muy difícil. ¿Cómo apoyas si estás igual de devastado que tu pareja?”.
A lo que Benjamín contestó recordando aquel momento: “Hubo diferentes roles que tienen que ver con la intuición y con ciertas características. Quizás hay ciertas cosas que tienen que ver con patrones culturales o no. En un cierto machismo o no. Fue lo que nos nació y yo entendí el mismo día que no podía flaquear”.
“Pasé a ser un sostén contenedor de todos, de mis hijitos, de mi mujer y hasta incluso de mi familia. Yo tenía que mirar el horror en los otros constantemente. Pero había una determinación de que no podía caer, por eso yo creo que mi proceso fue involutivo”, manifestó.
“Por eso me pasa que, quizá, el año pasado después de diez años yo estaba sufriendo diez mil veces más que hace… La ola me llegó tarde, pero al menos lo estoy haciendo”, aseguró sobre cómo sigue transitando esa pérdida.
Por último, explicó sobre el rol que tomó en su familia tras el fallecimiento de Blanca: “Yo en un principio, con mucho dolor, tuve que ser ‘el hombre’, el proveedor, salir a trabajar, abrir las cortinas. ‘El día está lindo’. ‘vamos, hagamos deporte’, ‘no aflojemos’”.