A cuatro meses del estreno, "Romper el círculo" sigue dando que hablar. Ahora, Blake Lively -la protagonista de la película que interpreta a Lily Bloom, el personaje de la novela de Colleen Hoover- demandó por acoso sexual al coprotagonista y director del filme, Justin Baldoni. La denuncia, presentada en los tribunales de Los Ángeles, fue dada a conocer inicialmente por TMZ y luego confirmada por PEOPLE y otros medios locales este sábado.
La película que durante su estreno causó polémica por la manera en que planteaba el abordaje de la violencia doméstica, vuelve a ser noticia, ahora de la mano del escándalo. Después de que Justin Baldoni hablara de su estado mental durante el proceso de producción;Blake Lively lo demandó por acoso sexual.
"Romper el círculo" es una adaptación cinematográfica de la novela más vendida de Colleen Hoover de 2016. En el libro, la florista Lily Bloom (Lively) se enamora del "tóxico" neurocirujano Ryle Kincaid (Baldoni).
Baldoni reveló que "casi tuvo un colapso" mientras filmaba la película. "Hubo momentos en la filmación de esto en los que simplemente tuve que irme. Tenía que retirarme e ir a sacudirme las cosas... Hay un momento en la película en el que Ryle encuentra el teléfono de Lily y encuentra un número de teléfono y está muy celoso y tiene el corazón roto y está enojado. Y no le hace daño. Pero puedes ver en sus ojos lo peligroso que es. Y en particular, después de esa escena casi me derrumbo y tuve que irme y llorar… porque había tanto dolor”.
Y ahora, Lively presentó una demanda contra Baldoni por acoso sexual. Además lo denuncia de "destruir" su reputación causándole "una angustia emocional grave". La demanda se hizo en una reunión a la que también asistió el marido de Lively, Ryan Reynolds. Según el informe, Lively llegó a la reunión con una lista de demandas con respecto al supuesto comportamiento de Baldoni, incluyendo "no más escenas de sexo, sexo oral o clímax ante la cámara por parte de ella".
Lively sostiene que el comportamiento de Baldoni le provocó “severos daños emocionales”.“Durante el rodaje, Baldoni había improvisado besos no deseados y había hablado de su vida sexual, incluidos encuentros en los que, según dijo, podría no haber recibido consentimiento. El productor Jamey Heath le había mostrado un vídeo de su esposa desnuda, según ella, y había observado a Lively en su camarín cuando estaba en topless, mientras le quitaban el maquillaje corporal, a pesar de que ella le pidió que apartara la mirada”, explica el New York Times.
Lively declaró al New York Times: “Espero que mi acción legal contribuya a levantar el telón de estas siniestras tácticas de represalia para perjudicar a las personas que denuncian conductas indebidas y ayude a proteger a otros que puedan ser objeto de ellas”.
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