El próximo 1 de julio, se realizará uno de los homenajes más esperados a Diana de Gales. El día en el que la Princesa hubiese cumplido 60 años, se inaugurará una estatua en su honor en los jardines del palacio de Kensington. Para la ocasión se ha organizado un acto reducido que estará encabezado por los dos hijos de Diana de Gales, el príncipe Guillermo y el príncipe Harry, que viajará solo.
Un encuentro muy esperado
El lugar donde se inaugurará la estatua es la residencia real, donde Lady Di vivió hasta su fallecimiento, que se produjo a causa de un accidente de tráfico sufrido en París el 31 de agosto de 1997. Aunque hasta último momento se han barajado distintos planes para poder adaptar el acto a las restricciones sanitarias impuestas por el primer ministro Boris Johnson.
Pero, finalmente se conocieron todos los detalles a partir de un comunicado oficial que ha enviado el Palacio. El acto supondrá el reencuentro público de los príncipes Guillermo y Harry, que en el último año solo se han visto una vez, en el funeral del duque de Edimburgo. La relación entre ellos no atraviesa su mejor momento, debido a las declaraciones que ha hecho el duque de Sussex sobre la realeza y sobre algunos miembros de los Windsor. Sin embargo, con el objetivo de honrar la memoria de su madre, han dejado de lado sus diferencias y se han puesto de acuerdo en todo lo relacionado con este homenaje.
"La localización ha sido escogida cuidadosamente, con la estatua situada a un lado de uno de los caminos del llamado jardín hundido, cerca de un espacio abierto entre los setos", comentó Jane Sidell, inspector de monumentos históricos de Inglaterra. Aseguró, además, que "será visible para el público que visite el jardín pero no afectará a las vistas del palacio o desde el mismo debido a su posición ligeramente hundida".
Harry ya está en Inglaterra
Harry llegó la tarde del viernes 25 de junio al aeropuerto de Heathrow (Londres) para cumplir con los cinco días de cuarentena obligatoria antes de descubrir la estatua de su madre, realizada en bronce por el artista Ian Rank-Broadley.
Harry no viajó con su esposa, con Meghan Markle. Además, todo apunta a que tampoco acudirá la duquesa de Cambridge puesto que en el comunicado oficial no se hace referencia a ella. La idea inicial de los hermanos era invitar a un centenar de personas a este acto, pero estarán únicamente acompañados de algunos miembros de la familia Spencer, de los miembros del comité de estatuas, del escultor encargado de la obra y del diseñador de jardines Pip Morrison.
Un escultor talentoso a cargo de la obra
El artista que han escogido para tallar la figura tiene una estrecha vinculación con la Familia Real puesto que también se encargó de hacer la imagen de la reina Isabel II de Inglaterra, la misma que aparece en todas las monedas británicas desde el año 1998. "Ian es un escultor extremadamente talentoso y creará un tributo a nuestra madre que perdurará en el tiempo. Estamos deseando presentar la estatua, que permitirá a todos aquellos que visiten el Palacio de Kensington recordarla y celebrar su vida y su legado", dijeron los príncipes Guillermo y Harry. Ambos tomaron esta decisión de manera consensuada con su tía Lady Sarah McCorquodale, hermana de Diana, y con el exjefe de personal, Jamie Lowther-Pinkerton.