Los padres de Deborah Kim vienen de Corea del Sur, específicamente de Seúl. Ella hizo dos carreras en Estados Unidos, fue a University of Southern California, en donde estudió Relaciones internacionales y Español.
Lo curioso, es que este último fue "por accidente", según sus palabras: "Por algún motivo desconocido, la Universidad solo requería tres clases de un idioma y al ser argentina estaba exenta del requerimiento. Sin embargo, mi carrera requería un 4to semestre de un idioma, así que terminé en la clase de español 4".
En exclusiva con Para Ti, Deborah Kim, fundadora de una línea de cosmética coreana, vegana y de industria argentina, contó: "Mi profesora de esa clase fue Claudia Soria, y ella me dio la idea de hacer la segunda carrera ya que con pocas clases podría tener doble título. Fue una decisión muy acertada, ya que la carrera tenía cursos de literatura, lingüística, poesía, y diferentes aspectos de la cultura española de distintos lugares, cómo España, México y otros países".
Así comenzó su camino en el mundo del Español. Pero la vida, le deparó otras sorpresas que jamás hubiera imaginado. Descubrí su historia.
La infancia de Deborah Kim
-Nos remontamos a tu infancia. ¿Qué recordás de ese momento y cómo fue criarte en el barrio de Devoto?
-Debo decir que fue un desafío crecer en una familia de inmigrantes comerciantes, rodeada de mucha gente donde sus padres eran profesionales. Esto impulsó a que yo esté determinada en ser una profesional, y me tome los estudios seriamente. Todavía recuerdo cuando estaba en la Universidad, que la vida de campus en el University of Southern California era muy diversa con muchas actividades, y yo solo quería estudiar. No quería desviarme de los estudios porque ser una profesional era mi meta más grande.
-¿En algún momento sentiste discriminación, o como llamamos ahora, “hate” en redes?
-Nací en argentina en 1980, y crecí rodeada de argentinos. Al día de hoy que por haber crecido en una familia de inmigrantes no entiendo los modismos, y soy una persona muy literal a la hora de comunicarme ya que el castellano lo aprendí en el colegio.
Por suerte siempre acepté ser “diferente”, y en el ambiente académico me llevé bien con todos mis compañeros. En donde sí he vivido el hate o discriminación han sido las redes sociales, inevitable ya que al tener una cuenta pública mi cuenta está abierta a la opinión de todo y de todos, lo bueno y lo malo.
La cultura coreana y argentina: un mix, según Deborah
-¿En qué influyó para vos ser descendiente de padres coreanos? ¿Y en qué aspectos crees que seguís teniendo su cultura presente?
-Intento mantener mi cultura, pero me cuesta por ser nacida aquí y estar casada con un argentino. Lo que sí mantengo es el cuidado de la piel. En la cultura coreana está bien visto y es un estándar de belleza “ser pálida” y cuidarse del sol.
-Estás casada con un argentino, también. ¿Cómo se llevan y como fusionan todas las culturas?
-Sí, tenemos un niño juntos, que se llama Romeo. Lo que me deja anonadada es que un día, ya de adulta y ya mamá, me acordé que de chica a mí me fascinaban los hombres con la tez morena y los ojos verdes. La descripción exacta de mi marido. Además, vivía obsesionada por los niños mestizos y hoy soy madre de uno y me parece el ser humano más hermoso de todo el planeta.
Mi marido vive explicándome modismos, yo siento como que viví muchas vidas pero todas por la mitad. Amo ser coreana, amo haber estudiado aquí y en estados unidos, pero siento que nunca fui 100% de un lugar. Soy un mix de todo.
La moda como estilo de vida
-¿Qué diferencias y similitudes encontrás en la moda argentina y coreana, y en la cultura en general?
-La diferencia más grande que he visto es que en Argentina es deseable estar bronceado. Me han preguntado mucho si estoy enferma, si me fui de vacaciones, y por qué estoy “tan blanca”. Por suerte aquí también se está concientizando muchísimo sobre el cuidado del sol, y ahora hay mucha gente bronceada pero con productos, y no con cama solar.
-¿Cómo surgió la idea de crear tu propia marca? Y ¿qué mensaje sentís que es importante dar a tus seguidores?
-Siempre perseguía a mis conocidos para “ayudarlos” con el cuidado de la piel y el cuidado capilar. Especialmente el pelo, ya que era mi punto débil. Le dedicaba muchísimo porque me costaba tenerlo lindo.
A raíz de una dermatitis seborreica, empecé a probar muchos shampoos, terminé probando uno sólido y fue un camino de ida. En base a eso, decidí hacer mi propio shampoo, y el resto es historia. No solo eso, tuve el primer aceite limpiador de industria nacional. Me enorgullece tanto haber llegado a eso. También tengo un producto que no existe en ningún lado del mundo, y es totalmente innovador, de industria nacional. Es un suero renovador de pies, te deja los pies suaves sin pelarte como sucede con los foot peelings.
Mas allá de incentivar a mis seguidores a cuidarse la piel, siempre les doy el mensaje de que lo que uno hace con amor siempre florece. Empecé mi marca de cero, en un rubro que nadie incursionó en mi comunidad, sin la ayuda de nadie, y hoy es conocida por su innovación y la calidad de sus productos.
-¿Nos podés compartir un tip cortito de skincare?
Limpieza suave dos veces al día, crema de noche y protección solar de día. Con esos 3 productos y con constancia la piel mejora un 100%.
Fotos: Chris Beliera.
Video: Cande Petech.
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