Tras el ataque de Rusia a Ucrania, Cancillería informó que hay 83 argentinos registrados permanentes en el país invadido por Vladimir Putin y unos 20 en tránsito. Uno de ellos es Boris D’Agostino, un entrerriano oriundo del municipio de Viale -departamento de Paraná- que vive hace varios años en la ciudad de Bucha -localidad en las afueras de Kiev- junto a su esposa Kristel y sus dos hijas. En diálogo con el sitio Nueva Zona, el hombre relató cómo fue la situación previa al bombardeo, y cómo logró abandonar Ucrania días antes del ataque ruso.
Boris y Kristel son misioneros de la Iglesia Adventista y trabajan en un colegio religioso con un enorme campus en Bucha. Luego de visitar la tierra natal del hombre durante las vacaciones, la familia regresó a Ucrania a fines de enero.
Sin embargo, en medio de la incertidumbre por el inminente conflicto bélico, el 16 de febrero lograron salir de país. "Las noticias eran alarmantes. Afortunadamente, ese día conseguimos pasajes para Turquía y volamos inmediatamente hasta ver qué pasaba y cómo evolucionaba la situación. Si se calmaba, pensábamos volver a Ucrania. Pero no solo que no se calmó, sino que se agravó todavía más", relató Boris.
Debido al trágico desenlace de este jueves por la madrugada, cuando Rusia decidió atacar, el entrerriano y su familia regresarán a la Argentina la próxima semana. Cabe recordar que Cancillería sugirió a los argentinos residentes o en tránsito en Ucrania abandonar dicho país.
