El 25 de mayo se cumplirá un nuevo aniversario del día que Juana Viale perdió a su hijo por nacer, Ringo Valenzuela, que murió en la semana 36 de gestación.
Corría el 25 de mayo de 2011 cuando la actriz y conductora tuvo que someterse a una operación cesárea de urgencia en el Sanatorio de la Trinidad de Palermo, donde llegó acompañada de su hermano Nacho, a las 4:30 de la mañana. En esos momentos Juana atravesaba una crisis con su pareja, el chileno Gonzalo Valenzuela, por rumores de infidelidad. Pocos meses antes había sido descubierta por fotógrafos a los besos en un auto con el ex ministro de Economía Martín Lousteau.
Al parecer la nieta de Mirtha Legrand habría ido a la clínica de urgencia por no sentir movimientos de su bebé, que era su tercer hijo. En ese momento, Juana tenía a Ámbar de Benedictis, hija de su relación con el músico Juan de Benedictis, que tenía 8 años y Silvestre Valenzuela, el primero de los tres que tuvo con el actor chileno, que tenía 3. Después la pareja tuvo a Alí, que nació en marzo de 2012 y en 2014, luego de 9 años de convivencia, se separaron.
Con respecto a qué pasó con el embarazo de Ringo, las causas nunca fueron aclaradas por la familia, que prefirió mantener en la intimidad las razones médicas del fallecimiento del bebé. En septiembre de 2011, invitada por Susana Giménez a su programa, Juana dijo "uno siempre tiene las dudas y las sospechas de lo que pudo haber pasado, pero no sabemos bien". Y agregó: "es como que te sacan una parte de uno (...) pero con amor todo se supera, yo tengo dos hijos increíbles, maravillosos a los cuales amo. Y Gon (Gonzalo Valenzuela), que es un hombre de fierro siempre ahí al pie del cañón... fue duro pero ya estamos... juntos y para adelante, yo creo que con amor se puede superar todo".
Por su parte, Valenzuela se refirió a la muerte de su hijo en una nota brindada a la prensa en 2015. "Silvestre está con la idea del cielo. Fue cuando… Tanta tragedia… Fue cuando murió Ringo, mi hijo, ahí entendió el cielo. Ahora hace poco se me murió mi perro, Alí, un perro que tuve durante 15 años, y Silvestre lo extraña muchísimo, y 'está en el cielo'…", contó en esa oportunidad.
"Con Silvestre vi una película mexicana, 'El Libro de la Vida', de monitos, de Guillermo del Toro, y la encontré maravillosa, porque ahí representa la muerte de una manera maravillosa: Que mientras uno recuerde a sus muertos, van a estar en un lugar de luz, en un lugar donde ellos van a estar bien. Cuando los olvidas, pasan a ser almas en pena. Por eso es muy importante que estén siempre presentes, y para mí están siempre presentes", finalizó el actor.