Paula Chaves compartió a través de sus redes sociales el susto que se llevó con sus hijos Filipa y Baltazar, fruto de su relación con Pedro Alfonso, por cuestiones de salud.
"Hoy por suerte estamos bien. Ayer, yendo a la guardia por Balta que estaba muy caído por vomitar sin parar, Filipa, que tenía una míinma febrícula producto de una posible otitis, convulsionó en el auto. Ya le había pasado en diciembre", relató la conductora en sus historias de Instagram.
De todas formas, la modelo explicó que su hija menor no se vio afecta neurológicamente "porque el foco de la convulsión es por la fiebre". Sin embargo, señaló que el mal momento que vivió como madre fue inevitable.
Paula destacó que decidió compartir esta experiencia con sus seguidores de las redes sociales para que aquellos que no estén al tanto de la existencia de la convulsión febril no se asusten tanto si se enfrentan a una situación simular. "Si yo hubiese sabido y leído de la convulsión febril, tal vez no me desesperaba tanto. Igual, verla en ese estado...", reconoció.
"Me gusta compartir mi experiencia porque tal vez a alguien pueda ayudar. Recuerdo hace muchos años, Indio, el hijo de Ro Guirao Díaz, había tenido lo mismo", añadió la modelo.
Y concluyó sobre el estado de salud de su hija: "Lo que tuvo Filipa no es grave, no es un problema de salud. Ella es sana. Y lo bueno es que sabemos que nos quedan cuatro años (N de la R: ocurren con mayor frecuencia en niños sanos de 9 meses a 5 años de edad)".
¿Qué es la convulsión febril?
Según Mayo Clinic, se trata de la convulsión que puede ser ocasionada en niños por un aumento de la temperatura corporal (fiebre). Las convulsiones febriles suelen ocurrir durante el primer día de la fiebre. Pueden durar algunos minutos y generalmente son inofensivas.
Los síntomas incluyen mirada perdida, temblores graves o tensión de los músculos, e incluso pueden perder el conocimiento. Si se trata de la primera convulsión del niño, se debe examinarlo. Si se repite o dura más de diez minutos, se necesita atención médica de emergencia. Se pueden utilizar medicamentos para tratar la fiebre y las convulsiones persistentes.