El urgente petitorio de Yago Lange, el novio de Juana Viale - Revista Para Ti
 

El urgente petitorio de Yago Lange, el novio de Juana Viale

La pesca de arrastre internacional está devastando el lecho marino del Agujero Azul, una zona crítica para la biodiversidad y la mitigación del cambio climático. Yago Lange, creó una petición en para la aprobación de un proyecto de ley que lo protegerá.
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El Agujero Azul está a 500 kilómetros del golfo de San Jorge, entre las provincias Chubut y Santa Cruz. El área se localiza en la Plataforma Continental Argentina extendida incorporada como parte de nuestros espacios marinos en 2019 por la Ley N° 27.557. Es por esto que su protección representará un ejercicio de soberanía a través de la conservación de nuestro mar y sus especies. Y es foco de atención del activista ambientalista Yago Lange, novio de Juana Viale.

Ubicada en el talud continental y atravesada por el frente productivo más importante del Hemisferio Sur, el Agujero Azul es una de las cinco áreas geográficas prioritarias de la iniciativa interministerial del Gobierno, Pampa Azul.

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Expertos y referentes de la ciencia así como organizaciones de la sociedad civil más prestigiosas de la Argentina, agrupadas en el Foro para la Conservación del Mar Patagónico, coinciden en lo necesario que es brindarle protección.

Por eso, Yago Lange creó una petición en Change.org para proteger el Agujero Azul. Ya más de 22 mil personas firmaron en https://www.change.org/LeyAgujeroAzul exigiendo medidas urgente para salvaguardar este ecosistema vital en el Mar Argentino. Además, la petición es una iniciativa impulsada por las principales ONGs de conservación marina de Argentina.

Change.org busca que cualquier persona pueda tomar acciones cotidianas para crear un futuro mejor, ayudando a personas de todo el mundo a mantener viva la esperanza en las causas que les importan mediante herramientas simples pero poderosas, como las peticiones. En Argentina, más de 16 millones de personas ya están actuando, reconociendo que el diálogo abierto es fundamental para el funcionamiento de los gobiernos democráticos y la construcción de mejores decisiones.

La pesca de arrastre de fondo se identifica como una de las actividades más destructivas para el lecho marino y su biodiversidad. En las aguas que bordean la Zona Económica Exclusiva de Argentina, atravesada por el frente productivo más importante del Hemisferio Sur y con menos de 200 metros de profundidad, se acumulan más de 200.000 horas de esfuerzo pesquero cada año.

Estas actividades, que operan sin regulación ni control, arrasan los fondos marinos, capturan recursos transfronterizos compartidos con los espacios marítimos argentinos, destruyen ambientes bentónicos vulnerables y liberan carbono secuestrado, contribuyendo significativamente a la crisis climática y a la pérdida de biodiversidad.

En respuesta a esta situación, un proyecto de ley para la creación del Agujero Azul como un Área Marina Protegida Bentónica se encuentra actualmente en el Congreso de la Nación. El área propuesta, que cubriría 148.000 km² de fondos oceánicos más allá de las 200 millas marinas, se localiza en la Plataforma Continental Argentina extendida, que fue incorporada como parte de los espacios marinos argentinos en 2019 a través de la Ley N° 27.557.

Cada día que pasa, el Agujero Azul es sometido a más de 450 horas de pesca de arrastre por parte de flotas internacionales. Mientras que los poteros operan en la columna de agua perteneciente a la alta mar, donde Argentina no tiene derechos soberanos, los arrastreros explotan el fondo marino, que sí pertenece a Argentina y sobre el cual el país tiene derechos de soberanía.

En este contexto, las Áreas Marinas Protegidas son esenciales para abordar la crisis ambiental actual. Estas áreas no solo conservan la biodiversidad y restauran ambientes y poblaciones marinas, sino que también contribuyen de manera crucial a mitigar los efectos del cambio climático, al absorber el exceso de calor atmosférico y del CO2 emitido por nuestras actividades.

Proteger el Agujero Azul significa salvaguardar ecosistemas marinos vulnerables, sistemas de cañones submarinos, y ambientes clave para la captura y almacenamiento de carbono.

La creación de esta área protegida es vista como una medida indispensable para detener la pesca destructiva y, a futuro, para que Argentina pueda exigir mayores niveles de protección sobre la columna de agua internacional cuando entre en vigor el Tratado de Biodiversidad más allá de las Jurisdicciones Nacionales.

Esta iniciativa es considerada un paso crucial para convertir el Agujero Azul en un símbolo de esperanza y conservación para las futuras generaciones, así como para establecer un precedente global en la protección de ecosistemas marinos.

Yago Lange cuenta por qué es importante esta petición

"Hoy quiero invitarte a unirte a una misión crucial para proteger nuestro Mar Argentino. El Agujero Azul, una zona única y valiosa en nuestras aguas, está en peligro. Cada día, más de 450 horas de pesca de arrastre internacional devastan el fondo marino, destruyendo ecosistemas enteros y poniendo en riesgo la biodiversidad que hace a nuestro mar tan especial", dice Lange en su petición.

"La creación del Área Marina Protegida Bentónica Agujero Azul es un paso fundamental para conservar las formas de vida que habitan en el lecho marino de nuestra plataforma continental extendida. Esta área será una barrera esencial contra la explotación descontrolada de las flotas internacionales que practican la pesca de arrastre de fondo. Ahora, te pido que te unas a mí para protegerla", explica.

"Necesitamos que el Senado de la Nación apruebe la creación de esta área protegida de 148.000 km², que no solo resguardará nuestros fondos marinos de la pesca destructiva, sino que también será un avance significativo en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Con tu firma, exigirás a nuestros senadores que actúen ahora, antes de que sea demasiado tarde", enfatiza.

Actualmente, el proyecto de ley para la creación del Agujero Azul se encuentra en el Congreso de la Nación. Este proyecto, que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados desde 2022, busca proteger 148.000 km² de fondos oceánicos más allá de las 200 millas marinas, en la Plataforma Continental Argentina extendida, incorporada como parte de nuestros espacios marinos en 2019 mediante la Ley N° 27.557.

"Es urgente que el Senado de la Nación trate y apruebe este proyecto de ley durante las sesiones parlamentarias de 2024. Necesitamos tu apoyo para exigir la creación de esta área protegida, que será clave para preservar la vida marina y combatir el cambio climático", cierra su petitorio.

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