William y Kate son los futuros reyes de Inglaterra. Y los herederos al trono gestionan el ducado de Cornualles, que antes era regenteado por Carlos, su padre. Ahora es el nuevo príncipe de Gales el que se encarga de esto y lo convierte en el mayor terrateniente de Inglaterra. El conflicto surge, porque los príncipes deben continuar con el plan que propuso Carlos III de levantar una ciudad jardín de 2500 viviendas en tierras de cultivo. Un proyecto que tiene a los ciudadanos del ducado muy enojados, ya que consideran que será una amenaza para el medio ambiente.
Una herencia con problemas
El ducado de Cornualles es uno de los ducados reales de Inglaterra junto al de Lancaster. Y el hijo mayor de Lady Di lo heredó tras la muerte de la reina Isabel II, así como también el título de duque de Cornualles. Establecido en 1337 por Eduardo III de Inglaterra, para su hijo el príncipe de Gales, quien fue el primero en ostentar el titulo que hoy lleva William.
Ecologistas indignados
William decidió que va a continuar el proyecto de su padre, el actual Rey, que consta en levantar una ciudad jardín de 2500 viviendas en tierras de cultivo. De acuerdo a los ecologistas, esto podría poner en serio riesgo a murciélagos, lagartos, mariposas y flores silvestres. Fueron varios los que aseguraron haberle enviado mail a los monarcas contando los problemas ambientales de su nuevo proyecto, pero ninguno tuvo respuesta.
Lo desmienten
De acuerdo a la monarquía el proyecto Faversham es sostenible y pretende crear un vecindario vanguardista, con una educación primaria, escuela de cricket y negocios para generar trabajo. Por lo que afirman, que esto le dará un valor agregado al ducado que será positivo a largo plazo.
Sin escándalos
Lo que tiene preocupado a William y a Kate es que quieren mantener un bajo perfil, a pesar de sus responsabilidades. Por lo que ninguno de los dos estaría muy contento con este escándalo heredado que generó su padre y que ellos habrían decidido continuar.