Leandro Bouzada no puede creer lo que está viviendo. Puede estar trabajando de lo que más le gusta en el mejor lugar para estar hoy, en Doha, Qatar, en medio del Mundial. Es que fue contratado como celebrity chef por el hotel de lujo Waldorf Astoria Lusail, en Doha, Qatar, para el diseño y armado de un menú lleno de sabores donde juegan carnes argentinas, seleccionadas personalmente por el profesional, usando cortes no tan tradicionales para Qatar, como entraña, t-bone, el asado banderita y achuras que son desconocidas del otro lado del mundo. Además, incluyó su plato favorito: los capeletis de seso de su abuela Nelly.
Este menú fue inspirado en adaptaciones de las costumbres culinarias de Argentina, siendo Leandro el único contratado del país para la alta cocina, llevando los sabores nuestros al mundial, posicionándose como uno de los mejores profesionales gastronómicos. Hablamos con él desde Qatar;
-¿Cómo preparaste el menú "argentino" para Qatar?
-Fue relativamente sencillo. La idea que bajaron era que querían platos con carne, y con cortes que no lleguen tanto a Medio Oriente o no se comen allá, como es el caso del lomo, ojo y bife de chorizo. Entonces lo trabajé desde esa premisa, y no fue tan complicado porque era adaptar lo que para mí es la comida cotidiana en Argentina. A partir de ahí diseñé el menú en base a carnes y achuras, típicas que usamos acá para cualquier asado y que se consumen un montón. La carne la elegí yo, es carne argentina, angus 180kg la media res aproximadamente.
-Imagino que los cortes de la carne no deben ser los mismos que acá, ¿Cómo te manejás con este tema?
-Los cortes ya los traje preparados desde Argentina, con el gramaje que quería, para que acá sea todo mucho más fácil. En el caso de la morcilla me traje todos los elementos para hacerla casera, ya que por un tema de exportación no entran este tipo de alimentos. Y para los chorizos me traje una mezcla de carnes, dado que el cerdo acá está prohibido y lo voy a realizar con una tripa sintética. En el caso de la entraña, que es un corte que se está vendiendo mucho, lo reemplazo con productos locales, como carne australiana, que acá se consume un montón.
-¿Cómo estás viviendo esta experiencia?
-Excelente, siempre que tengo la posibilidad de viajar, para mí es todo un aprendizaje, desde los productos, las cocinas y conocer nuevas personas, además de las culturas. Vengo a vivir una experiencia que para mí es única y quiero aprovecharla al máximo. La gente acá es muy hospitalaria y estoy seguro que me voy a llevar cosas lindas y divertidas.
-¿Cómo creaste el menú, en qué te inspiraste?
-El menú lo pensé, desde lo que a mi me gusta comer. Ése fue el puntapié inicial, lo que trate es cambiar un poco la dinámica de las presentaciones y las preparaciones. Un ejemplo de esto fue que durante una semana hubo choripán en el menú y como acá no se usa cerdo, hice un blend propio lo embuti con una máquina que traje de argentina y lo presenté en un pan bao. Inspirado en el queso y dulce hice un cheesecake de batata.
También preparamos los típicos postres como flan, budín de pan, entre otros. Además, vamos a incluir guarniciones argentinas como ensalada mixta, vegetales al rescoldo, tortilla de papa. Otro plato que va a jugar fuerte son los capeletis de seso, receta original de mi abuela Nelly.
-¿Cuál es la respuesta a tus menúes argentinos?
-La verdad, es excelente la aceptación. Es más, en varias oportunidades tuvimos que parar la venta porque se agotó la producción del día. La gente está en modo mundial y por ende en modo relajo, lo que hace que estén con curiosidad a probar cosas diferentes, además de que tienen tiempo para hacerlo.
-¿Cómo es vivir el Mundial mientras estás trabajando allá en Doha?
-La verdad es súper emocionante, yo soy cero futbolero, pero tuve la chance de ir a ver algunos partidos y se vive una adrenalina hermosa. Me siento un privilegiado. Es una experiencia única que hay que vivirla, porque es difícil ponerla con palabras. Me quedo hasta el final del mundial, 20 de diciembre.
