La supermodelo Gigi Hadid llegó a la red carpet de la Met Gala luciendo un vestido hecho a mano por Thom Browne que no tardó en volverse viral en redes sociales. El estilista de Hadid, Mimi Cuttrell, se inspiró en estatuas de jardín envueltas en plantas para este increíble look.
El vestido de Gigi Hadid requirió de una gran producción. Si bien salió sencilla del hotel, al llegar estaba adornada por esta sobre falda que está hecha de chaquetas de esmoquin. "Siempre es un privilegio ver a Gigi cobrar vida. Es un verdadero talento que brilla en todo lo que hace", jo Browne. "Quería que su look encarnara la fragilidad y el inmenso trabajo que se ve en la exhibición de Andrew Bolton, floreciendo en la alfombra y en el Metropolitan Museum of Art", agrega Browne sobre Hadid.
Esta noche, Hadid luce un look inconfundiblemente Browne. Un vestido corsé blanco con hombros descubiertos y caderas exageradas. Debajo lleva un abrigo de seda blanca moiré con ribetes de satén negro, adornado con rosas amarillas en 3D. Con un enfoque intenso en cada detalle, el look completo tomó a un equipo de más de 70 personas más de 13,500 horas para hacerlo completamente a mano, y vivirá en el archivo permanente de Browne después de la Met Gala.
Con apliques de espinas, el jardín de rosas amarillas está artísticamente plasmado en el look de Hadid. La falda voluminosa de la capa exterior tomó a un equipo de 40 personas más de 8,500 horas para bordarla. El vestido corsé también fue una impresionante hazaña de la artesanía; un equipo de 20 artesanos pasó 5,000 horas bordando a mano 2.8 millones de cuentas de micro bugle en el vestido.
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