Desde hace días se viene hablando de que la salud de la Reina no estaba pasando por su mejor momento. La primera ministra de Inglaterra tuvo que ir a Balmoral para celebrar el tradicional besamanos. Fue por sus problemas de movilidad que la monarca no llegó hasta Buckingham. Algo normal en una persona de 96 años. Sin embargo, hoy las alarmas se encendieron cuando los médicos anunciaron que se encuentra bajo supervisión.
Toda la familia viajo a Balmoral
Entre los detalles que más sorprendieron, y alarmaron, es que los parientes más cercanos de la Reina debieron volar a Escocia de urgencia. Entre ellos Harry y Meghan, que estaban en Londres para acudir a un evento benéfico. Lo que impacta es que la relación de ellos con la monarca no era la mejor. De hecho hace días fue noticia que de las más 300 joyas que la Reina dejará de herencia, decidió que ninguna sería para los primogénitos de Meghan y Harry. De hecho, hasta modificó su testamento para asegurarse de que esto suceda.
Relación familiar conflictiva
Desde que Meghan Markle llegó a la monarquia inglesa la relación con la familia de su esposo fue muy conflictiva. Antes del casamiento, hubo rumores sobre un chiste racista que molestó a la actriz. Y parece que desde ese momento, la relación nunca se recompuso. Esto se le suma a que hoy, Harry y William tampoco se hablan. El problema parece estar en que Harry no soporta a Camilla, y se niega a que sea Reina.
Dejaron los problemas de lado
A pesar de la tensión que hay entre ellos, parece que entre todos decidieron dejar atrás los desacuerdos que los unen, y priorizar a la matriarca de la familia, que parece estar viviendo sus ultimas momentos de vida. Es que a pesar de sus 96 años, las noticias sobre su salud no son alentadoras. La monarca tiene problemas de movilidad y debió suspender casi toda su agenda. Algo poco común en ella.
Un problema de estado
Si bien es claro, que la familia es la más afectada ante esta situación, la Reina Isabel es un personaje muy relevante a nivel político y religioso. Por lo que su estado de salud mantiene en vilo al mundo entero. Con sus casi cien años, Isabel siempre estuvo ala altura de lo que le tocó. Y eso, le hizo ganar el respeto de todos sus pares.