Después de todo lo que se dijo, este lunes la China Suárez rompió el silencio en una entrevista con Alejandro Fantino en donde sorprendió al reconocer que tiene una buena relación con todas sus ex parejas. Se trata de la primera vez que habla y hace referencia al wandagate, al verse envuelta en la pareja de Mauro Icardi y Wanda Nara.
“Tener buena onda, para mí, es condición sin ecuanom porque es una responsabilidad traer a un hijo al mundo. Es una vida. Después los chicos no pueden pagar las peleas de los grandes y tengo el ejemplo de mis papás que, para mí, eso es clave”, dijo en el ciclo “En Primera Persona” de Star+.
¿Cómo vivís que lo que hagas tenga una especie de dron observando, te psicoanalizas?”, le preguntó el periodista. Y ella respondió: “Soy rara. Tengo épocas en donde estoy más fuerte o más estable emocionalmente. En mi último embarazo todo, por más chiquito que sea, me afectaba. Ahora estoy más grande. Entendí que siempre se va a hablar. Yo lo tengo un poco aceptado y creo que, no es el precio de la fama, pero si de vivir con la liberad con la que vivo yo”.
“A mí nunca me importó el qué dirán. Ni en el colegio ni en el trabajo. Creo que tiene que ver con tener los pies sobre la tierra y mirar con perspectiva. ¿Qué me está pasando? ¿Estoy viviendo un terremoto? Sí. ¿Mis hijos tienen salud? Sí. ¿Mis amigos me quieren? Sí. Trato de ver todo de arriba como si saliera de mi cuerpo para ver desde afuera. Lo más importante es la salud y el resto se puede arreglar”, confesó a corazón abierto.
“A veces me escucho hablar y sueno muy soberbia. Yo no soy así, pero es un mecanismo de defensa”, agregó. Y Fantino quiso saber en referencia al wandagate: “¿Cómo transitaste todo?”. “Te llega todo por algún lado, pero cuando hay tanto ruído yo le digo a mi entorno que no quiero saber. Estaba en Madrid grabando mucho, cumpliendo un sueño y tenía la cabeza puesta en eso. Fue una película que me costó mucho. Tengo demasiado para ser feliz”, respondió.
“Nunca sentí que tenía que dar explicaciones. A lo mejor suene soberbio, pero el día que mis hijos que me pregunten lo que quieran saber, a los únicos que les voy a dar explicaciones es a ellos. Yo ni a un novio me banco que me venga a pedir explicaciones. No me lo banco. No tengo tolerancia para esas cosas. No por hacerme la superada, pero no tengo ganas. Yo no soy un personaje, yo soy yo. A mí me quieren y me odian por las mismas razones: mi personalidad. No por otra cosa”, sentenció.