Adelgazar siempre es una situación que genera mucha ansiedad por empezar a perder peso. Pero justamente, cuando hay sobrepeso y se busca hacer una dieta para bajarlo, hay que pensar es que es salud, y tener una buena alimentación es lo más importante. Esa alimentación saludable debe ser parte del proceso también y no bajar de peso con métodos extraños porque puede resultar muy riesgoso. Lo importante es concurrir a un médico especialista en nutrición y no dejarse llevar por dietas de moda que pueden terminar provocando un serio problema a nuestra salud.
Eso sí, no siempre es fácil. Y no es solo la tentación de comer un alimento con muchas calorías y pocos beneficios. También a distinguir qué consejos son buenos y de cuáles es mucho mejor pasar porque pueden poner en peligro nuestra salud.
Hace un tiempo apareció en el panorama de los trucos y consejos para adelgazar el médico japonés Yoshinori Nagumo, autor del libro Un día, una comida, que propone precisamente eso: comer una vez al día.
Según Nagumo, ese es el secreto para mantenerse joven: "Si no comemos por la mañana ni al mediodía, al llegar la noche nos suenan las tripas. La primera vez que suenan, segregamos la hormona de la longevidad [Nagumo no menciona cuál es esa hormona], que rejuvenece la piel y las mucosas. La segunda vez se activa la sirtuina, el gen rejuvenecedor, que reactiva las células y los genes [las sirtuinas de hecho no son un gen, sino una serie de enzimas que regulan la reparación del ADN, el envejecimiento y la muerte celular]. Si nos suenan una tercera vez, el tejido adiposo (la grasa) sintetiza la adiponectina, una proteína que metaboliza la glucosa y tonifica las arterias", decía en una entrevista para La Vanguardia.
Asegura que también es una buena forma de mantenerse sano y adelgazar, ya que según su opinión el cuerpo humano no funciona bien con el estómago lleno, y es mejor hacer una sola comida, por la noche, y así obtener todas las calorías necesarias de una vez, optando siempre por cereales integrales, frutas con piel, verduras y hortalizas y grasas saludables de origen vegetal.
Todo resulta muy extraño, por lo que es importante tener en cuenta los siguientes detalles.
Así (no) funciona esta dieta
La teoría detrás de esta dieta se basa en comer solamente una vez al día, y la mayoría elige la cena, así que ayuna durante todo el día y consume todas las calorías que necesita de una sentada, calculando según su nivel de actividad.
Según algunas versiones no hace falta mantener un equilibrio entre macronutrientes, solamente hay que comer lo suficiente hasta sentirse lleno incluyendo alimentos de todos los grupos (hidratos de carbono, proteínas y grasas).
En algunos casos se permiten un par de snacks durante el día, además de la comida principal, como por ejemplo una pieza de fruta, y también bebidas sin calorías, como agua, te o café (en el caso de Nagumo, él también desaconseja estas bebidas por su efecto adictivo).
¿Tiene algún beneficio?
En principio, comer una vez al día no tendría por qué ser un problema a la hora de adelgazar. Aunque estamos acostumbrados a oír que es necesario hacer cinco comidas al día y que el desayuno es la comida más importante, de hecho no existen evidencias que respalden esos argumentos. O que realmente cuenta es la cantidad total de calorías que ingerimos al día, y que estas se mantengan por debajo del nivel de calorías que quemamos al día si queremos adelgazar. Cómo las repartamos a lo largo del día en realidad parece ser algo irrelevante y lo mejor es ajustarlas a nuestras preferencias y actividad diaria.
Por otro lado, se han realizado algunos estudios científicos para evaluar si comer una vez al día o hacer ayunos intermitentes es bueno para la salud como aseguran sus defensores.
Y los resultados muestran que sí, en algunos casos. Por ejemplo, un ayuno intermitente durante unas seis semanas mejora los niveles de azúcar y el peso en personas con diabetes tipo 2. Además, el ayuno intermitente es, comparado con la restricción calórica, concluyó que el primero puede ser un método más eficaz para ayudar a personas prediabéticas o con resistencia a la insulina.
Eso sí, hay algunos problemas con esos estudios. Por un lado, que no se sabe si esos beneficios se mantienen en el largo plazo. Y por otro, la mayoría de esos estudios se han llevado a cabo en hombres, así que es posible que los efectos de comer una vez al día sean diferentes en las mujeres debido a diferencias en muchos procesos biológicos.
Sus riesgos
Eso sí, comer una sola vez al día tiene sus riesgos. Para empezar, puede causar una sensación de hambre difícil de manejar para muchas personas, lo que podría terminar provocando que el plan sea difícil de mantener, que se termine picoteando entre horas (y aquí "entre horas" significa todo el día) y, al final, que estemos ingiriendo muchas más calorías de lo planeado inicialmente.
Además, esa sensación de hambre puede causar también problemas de ansiedad para algunas personas, y que llegado el momento de la cena, terminen dándose un atracón mayor de lo planeado, tirando también por tierra el déficit calórico.
Por otro lado, tantas horas al día con el estómago vacío pueden causar fatiga, cansancio, problemas de concentración y falta de energía, sobre todo en comparación con las personas que aportan a su organismo energía de forma progresiva durante todo el día.
Hacer ayunos intermitentes puede tener algunos beneficios a corto plazo, pero si lo haces durante periodos de tiempo demasiado largos, el cuerpo entra en modo reserva y ralentiza el metabolismo (así que quemarás menos calorías aunque hagas lo mismo), producen ansiedad que puede llevar a atracones y puede terminar interfiriendo con tus esfuerzos por adelgazar.
Si querés perder peso, hacelo siempre poco a poco y con cabeza, buscando la ayuda de un nutricionista titulado que te vaya guiando. Para empezar, puedes hacer algunos sencillos cambios como evitar productos procesados y bebidas azucaradas y aumentar tus niveles de actividad física, aunque sea simplemente subiendo cada día por las escaleras en vez de coger el ascensor.