Cuando en 1991 Gabriela Arias Uriburu contrajo matrimonio en Guatemala con Imad Shaban nunca imaginó en que estaba tomando una de las peores decisiones de su vida. Después de haber tenido tres hijos, decidió en 1997 separarse y terminó iniciando, sin darse cuenta, un verdadero calvario: el hombre se llevó a los tres menores a Jordania, su tierra natal, y por largos años ella no los pudo ver.
En ese momento se convirtió en una referente por su batalla en los distintos organismos internacionales que velan por los derechos del niño. Recién en 2005 consiguió retomar el vínculo con Karim, Zahira y Sharif sin restricciones, pero el contacto fluido se comenzó a dar desde 2010 cuando empezó a trasladarse a los puntos en los que viven actualmente para acompañarlos en cada uno de los momentos importantes.
“He sido sostenida en fuerza por el infinito amor de la madre y el padre que son como el cielo y la tierra. Me costó mucho tomar esa belleza que el dolor entrego; siempre veía lo que le quitaron más no lo que nació y alumbró esa tragedia. Llegó el tiempo de honrar este lugar alcanzado con humildad y simpleza”, afirmó en un posteo que realizó en las últimas horas para anunciar uno de sus momentos más felices… que también involucra a una de sus hijas.
“Fueron tres días intensos e inmensos en Londres donde se celebró el casamiento de Zahira, nuestra hija. Y el universo lo coronó el día de ayer celebrándose en esta parte del planeta, el día de la madre”, anunció emocionada en un relato en el que mostró el vestido que eligió para la celebración y mostró parte de la intimidad del festejo.
“Maravilloso diseño Argentino para ocasiones únicas. Argentina representada en todo su color y magnificencia de nuestros telares. Vestida con los materiales de la tierra de mis ancestros, Salta”, agregó para describir el diseño.
