En una nueva edición, MasterChef Argentina (Telefé) abrió su segundo programa con nuevos concursantes y más historias de vida. En esta oportunidad, Belén (31) fue la encargada de emocionar al público con su luchadora historia de vida, que la joven comentó con detalles en su presentación.
"Quería estudiar cocina pero dejé para criar a mis hijos", expresó la muchacha, quien es madre de cuatro hijos. Belén deleitó al jurado integrado por Damián Betular, Germán Martitegui y Donato de Santis, con un tradicional pollo al verdeo. Mientras preparaba este platillo, se animó a contar sus orígenes.
“Me abandonaron en una plaza, vivíamos en un barrio precario en una casilla, y pasamos necesidades realmente, pedíamos pan en las panaderías. Éramos cartoneros. Desde el deseo de comer y tener comida, disfruto cocinar", afirmó Belén, que no pudo evitar emocionarse de los nervios.
Si bien no logró convencer a Betular, Martitegui decidió darle un voto de confianza, para seguir aprendiendo en el certamen. “Te merecés esta oportunidad para enseñarte a cocinar, para mí es un sí”, opinó el chef. Ante el resultado positivo para ingresar a Masterchef, la joven dedicó el triunfo a sus hijos y a su pareja.
Esta historia de resiliencia se suma a la de Antonio, el concursante de Salta, quien hizo llorar a los jurados con su plato de humita. "La gastronomía empezó desde muy chico y fui incentivado por mi familia. Es mi sueño, siempre quise estar ahí. Estoy practicando mucho. Quiero que los jurados conozcan los platos, mis sabores y mi tierra", había asegurado.