Aunque siempre evita hablar de su vida privada, la historia de amor de Beto Casella y Carolina Wyler comenzó bien cerca de la exposición. El conductor de 61 años y la locutora treintañera comenzaron a forjar una fuerte relación a rapaz de compartir largas jornadas de trabajo: es que ella era su locutora en los programas “Levantado de 10” (Radio 10) y “Bien Levantado” (FM Pop), ciclos que sumaban siete horas diarias de aire. Se puede decir que todo fue surgiendo entre tanda y tanda, café y café.
De esa forma, él decidió empezar una nueva vida luego de separarse en 2013 de Patricia Quintero, la madre de sus dos hijos Franco y Juan Pablo. Las primeras imágenes de este romance fueron captadas por la Revista Paparazzi en 2014, casi un año después de esa ruptura. Ellos se conocieron en 2008 cuando empezaron a trabajar juntos en las radios de Grupo Indalo, pero hay que destacar que la relación amorosa empezó tiempo después.
"Hice un acuerdo con la mamá de mis hijos para -por un tiempo prudencial que consideramos los dos- no referirnos ni a qué pasó ni si estamos con alguien, si ella está con un morocho ugandés o no. Después, si a mí me sacan fotos teniendo sexo con una perra pequinés, yo me la banco, pero no me atribuyan frases que no pronuncié porque me complican la situación personal... No es que la complican, pero yo tengo un acuerdo con una persona de no hacer referencia a un determinado tema", había manifestado Casella por ese entonces.
Cuando todo se encaminó, se mudaron juntos a un departamento en el barrio porteño de Palermo en 2015: los primeros meses de convivencia estuvieron marcados por las “clases” en donde ella le enseñaba inglés con las canciones de “The Beatles” y la prohibición que le imponía de probar los hidratos de carbono.
Así nació este amor que siempre estuvo "resguardado" de los medios
La primera entrevista que dieron juntos fue recién en 2017 cuando se presentaron en el programa “Vino Para Vos” que conduce Tomás Dente en KZO. En esa charla, revelaron que la oficialización del romance se debió a los papás de Carolina. Es que ella temía cómo iba a impactar la noticia debido a la diferencia de edad ya que ´se llevan 26 años. "Para una chica de 27 años (al momento de comenzar el noviazgo), con una linda formación religiosa, formadísima en escuelas rigurosas, que te caigan con Beto Casella... En un momento, como padre decís '¿qué hice?'", ironizó el legendario conductor de “Bendita” (El Nueve).
Carolina recordó que cuando se conocieron las charlas se circunscribían a temas laborales. Ahí reconoció una de las cualidades de Beto en el trabajo y su incondicional compañerismo. Le preguntaba, al igual que al resto, si había cobrado. Siempre estaba preocupado por el bienestar de sus equipos, algo que sostiene en la actualidad. Son cosas que no se pierden. "Si sé que un compañero no cobró, le mando un mensajito a ver si necesita guita. Fueron 5 años que no hubo nada más que compañerismo, hasta que un día...", agregó.
Y sí, ese día llegó. Las conversaciones por WhatsApp comenzaron a traspasar la barrera de lo que ocurría en los pasillos del edificio ubicado en Uriarte y Nicaragua en el barrio porteño de Palermo. Empezaron a hablar de actualidad, de política, se recomendaron textos de lectura y un día terminaron combinando tomar unos mates juntos. “Lógicamente no pasó nada”, aseguró.
Pero entre tanta charla, Carolina contó que hubo un mensaje que significó un verdadero antes y después: "Un viernes a la noche fui a comer con unas amigas y después me fui a casa. Laburo un montón, no tenía esas cosas de bares y salir mucho... Y me quedé en casa viendo videítos de YouTube de discursos de Perón y le mando un mensaje de texto: 'Perón y vos me están volando la cabeza'”.
El mensaje terminó descolocando al hombre nacido en Haedo que terminó preguntándose cómo seguir de ahí en más. "Puede ser que haya sentido algo previo, no lo tengo muy claro, porque fue hace varios años, pero puede ser que ya haya sido otro el intercambio del que había habido durante 5 años", entendió.
El día que el amor tuvo un freno y se separaron
No todo fue color de rosas en esta relación. Cuando en enero de 2018 Beto se preparaba para uno de los momentos profesionales más importantes del último tiempo debido al pase a la Rock & Pop, manifestó que esa alegría estaba un tanto opacada por su presente personal. “Estoy en un impasse de 2 o 3 meses con mi última pareja. Tenemos una relación fabulosa, amistosa y amorosa, hasta nos vemos para comer, pero estoy viviendo solo”, había definido.
Justificándolo por la “dinámicas de las parejas”, comentó que no podía especificar con certeza el motivo que los había llevado a esa situación. Pasaron casi un año alejados hasta que a fines de 2018 se mostraron nuevamente juntos asistiendo al cumpleaños de la abogada Mariana Gallego. La reconciliación fue paulatina y en la actualidad ya conviven… y atravesaron la pandemia juntos, que no es para menos.