Corría el año 1993 y Catherine Fulop junto a Carlos Mata se robaron el corazón de millones de argentinos con la novela Déjate Querer que se emitió por la pantalla de Telefé. Para la actriz venezolana este no fue un trabajo más: es que además del éxito, hubo algo mucho mejor. Es que conoció en las grabaciones a Ova Sabatini… ¡y se dejó querer! Ambos compartieron una escena que terminó extendiéndose a lo largo de los últimos 28 años.
“La novela ya terminaba, faltaban pocos capítulos, y yo digo: ‘Hay Dios mío, ¡ese tipo!’. Toda la novela yo lo miraba, pero nunca pasó nada porque yo estaba terminado una relación y él también tenía sus cositas. Más allá de que mí relación estaba muerta, faltaba enterrarla. ¿Viste cuándo velas a un muerto?”, recordó la bella Fulop en una entrevista con Teleshow al manifestar ese flechazo.
La historia continúa cuando se lo cruza en uno de los pasillos mientras ella estaba caminando con Alejandra Gavilanes, otra de las protagonistas de la ficción. La intrépida venezolana le dijo a Ova que era bello y su amiga, terminó rematando: “Ella te quiere dar un beso”. La respuesta fue positiva y comenzaron a proyectar una vida juntos.
Fue así que en abril de este año cumplieron 23 años de casados. En el medio, dos hijas: Oriana y Tiziana. ¿Crisis? Pocas. Una vez Sabatini reveló que tuvieron un mal momento cuando la hija mayor tenía sólo un año. Duró poco tiempo, todo se recompuso y la familia siguió creciendo.
Quizás la gran clave del éxito de esta pareja, tal como definió ella en su momento, está en que "cuando uno quiere construir un matrimonio hay que saber ceder y dejar el ego de lago". La actriz no cree en las fórmulas y si confía en la naturalidad del día a día. “Lo que sí necesitás es ciertos ingredientes para que la pareja vaya evolucionando. Y la base siempre es el amor y gustarse uno al otro", dijo.
Fulop y El Ova, como cariñosamente lo llaman, atravesaron el momento más complicado de su relación por un hecho extremo. En Caracas, vivieron un intento de secuestro cuando un auto se les cruzó. “Me bajaron del auto y me metieron en otro mientras apuntaban con un arma al Ova. Yo gritaba, pensaba que me iban a matar. Fue hace doce años, más o menos, porque hace 9 que no voy a Venezuela", había contado una vez.
Lo cierto es que él le salvó la vida: "Estaba histérica y Ova había cambiado 100 dólares y les dio los bolívares, que eran un montón de billetes. Me dejaron ir, yo creo que ni me aguantaban mi locura. Creí que me iban a matar. Siempre es mi héroe. Nos cuida, nos protege y tiene la solución de todo. Y jamás grita".