A Lorena Paola la podemos ver actualmente en "Bienvenidos a Bordo", el programa de entretenimiento de Guido Kakzka realizando toda clase de desafíos. Es actriz, cantante y trabaja en el medio desde que era muy chiquita. Pero comenzó su carrera artística a los 6 años de edad en los populares programas musicales infantiles Cantaniño y Festilindo.
En aquel entonces, se anotó para participar en el Segundo Festival Interamericano de la Canción Infantil. Para ello, viajó a Puerto Rico en donde compitió de la gran final nacional, de la cual resultó ganadora. A su regreso, Festlindo hizo un programa especial en su honor. Y, al año siguiente, grabó su primer LP "Crecer con papá", cuyo hit "El sustantivo" la hizo conocida a nivel internacional.
Pasó toda su niñez y adolescencia rodeada de cámaras, participando en novelas muy exitosas como Crecer con papá y Una chispa de amor. Durante los 80 y los 90 fue una estrella en las televisión argentina. Pero luego se alejó de la pantalla chica, abocándose al teatro.
Luego, siendo una adolescente grabó su segundo disco De aquí en más en, en 1991.
Pasó su vida entre el cine, la televisión y el teatro. Y también se animó a incursionar en la radio, haciendo una participación en "El club del Moro". "Hace unas semanas fui invitada a la radio y me lo propuso después de dar la nota. Es como que los planetas se alinearon porque yo tenía muchas ganas de hacerlo”, contó tiempo atrás, cuando relataba cómo se le había presentado la oportunidad.
A pesar de su fama siendo tan solo una niña, ella reconoce que hay una generación más joven que no la conoce, ya que pasó muchos años trabajando en teatro, siempre manteniendo una excelente relación con el público. “Nunca dejé de laburar. Estuve 12 años haciendo giras. Era feliz, pero vivía de abril a noviembre viajando por todo el Interior. Capaz esto hace que vos no estés tan expuesta a la televisión y la gente no lo tiene en cuenta. Sin embargo, siempre tuve una excelente relación con el público: cuando camino por la calle es ´¡Ay, Lorenita!”, dice Lolo, como la llaman sus más cercanos".
En una entrevista con Infobae, comentó que otro hubiera sido su destino, de no haberse dedicado desde tan chica al medio: "Me gusta la medicina, pero era una cosa o la otra. Estudié porque, además, fue la condición que me puso mi papá para seguir en el medio. Él, que no estaba muy de acuerdo y fue el último en enterarse, no sabía si era un capricho".
Estuvo casada con el periodista Pablo Fernández, con quien tuvo un hijo llamado Luka en 1998. En 2001 se divorció.
Curiosa y emprendedora, no se quedó solamente con la actuación y la música como ocupaciones exclusivas: "Soy profesora de gimnasia y bailarina. A los dieciséis años empecé con el tema del fitness. A veces hablan de la transformación de Lorena Paola, pero fui gordita de chiquita, después me estilicé y nunca más".
Se reconoce como una apasionada del fitness y también se dedica, junto a su marido, Esteban Gatti, con quien está hace más de 20 años. Juntos brindan entrenamientos personalizados online en la plataforma @entrenarte.
Cuando le preguntan cómo maneja la exposición mediática, sobre todo teniéndola desde la infancia, explica: “La exposición es una consecuencia de esta profesión”, y “hay que aprender a manejarla”. “Yo no sé lo que es estar fuera de ese mundo: nunca pude tener una vida normal. De niña todo el mundo se me abalanzaba. Pero mi mamá, que es muy compañera mía y había recorrido su vida en el anonimato, me enseñó a manejarlo desde muy chica”, destaca la actriz.