Es hija de uno de los actores más valorados y queridos -Ricardo Darín- y hermana del Chino, quien también se dedica a la actuación y va abriendo su propio camino. A su vez, cuñada de la actriz española en franco ascenso, Úrsula Corberó, quien saltó a la fama internacional en La Casa de Papel y por estos días estrena su primera película en Hollywood, Snake Eyes.
Pero Clara, la hija más chica de Ricardo Darín y Florencia Bass se maneja con un bajo perfil y forjándose un futuro propio en lo que ama, que es el diseño y la moda. Mantiene un perfil bajo, no realiza demasiadas apariciones públicas y tampoco hace gala de su "ilustre" apellido, mientras se abre su propio camino como empresaria.
Sus padres llevan más de 30 años juntos y su amor ha podido con cualquier crisis a lo largo de estas tres décadas. Ella misma, a sus 26 años, hace 8 que está en pareja y -si bien asegura que no cree en el matrimonio- sostiene que le gustaría formar una familia tan unida y amorosa como la que crearon sus padres.
Está actualmente junto a Rodrigo, a secas, ya que no tiene nada que ver con la vida pública: de él se sabe que es abogado y hermano de un íntimo amigo del Chino. En una de las pocas entrevistas que dio, con La Nación, Clara comentó que su anterior noviazgo había durado 5 años y lo inició a los 12.
Con brillo propio
La más chica de la familia Darín optó por las ramas artísticas de la música y del diseño, ya que hace un tiempo confesó que su timidez no le permite animarse a la actuación. Por eso, para ella fue vencer un gran miedo lanzarse como cantante, lo que hizo en 2015, donde se lanzó al escenario para cantar junto a un guitarrista tres temas (Route 66, de los Rolling Stones, Valery de Amy Winehouse y Underneath it all, de No Doubt) y recibió muy buenas críticas por parte de los asistentes al evento. Clara se formó junto a Susana Rossi y Dolores Santa Coloma, y dice que dos de sus artistas favoritos son Macy Gray y Lenny Kravitz.
En cuanto a su carrera como diseñadora, fundó la marca Sarasa, con la que vendían online y a través de un showroom. Su primer emprendimiento comenzó como un hobbie junto a su amiga de la infancia, Sofía Koening: al terminar la secundaria, comenzaron a customizar camisetas y sudaderas en el salón de su casa.
Después de esa experiencia, se tomó un año sabático para estudiar maquillaje profesional junto a Mabby Autino. Y, si bien en aquel entonces pensó estudiar Diseño de Indumentaria, finalmente se decidió por Bellas Artes.
Su gusto por el diseño de indumentaria fue creciendo, hasta que en 2016 inauguró su línea CxClara en Palermo Soho. Una de sus más recientes creaciones es Yey House, una empresa que fundó junto a dos amigas, donde reúne a más de una treintena de marcas de jóvenes diseñadores argentinos.
Clara comparte con el resto de su familia su pasión por el esquí: por este motivo todos los años tratan de salir en familia a realizar esta actividad. Del último viaje participó también su cuñada, Úrsula Corberó, con la que Clara tiene una excelente relación.