Si bien la reina Isabel, de 95 años, dado que es una mujer que -literalmente- usa una corona y gobierna sobre 54 estados, se podría asumir que hace lo que quiere. Pero parece que no es tan así: los médicos reales le están sugiriendo que deje de lado una costumbre que tiene hace varias décadas (y que suele disfrutar mucho): su cocktail diario.
La mandataria, que fue recientemente vista usando un bastón, generó preocupación sobre su estado de salud. Así que, si bien lo que probablemente desea la mayoría en su entorno es lo mejor para ella, fuentes cercanas a ella dicen que no está muy contenta al tener que renunciar a "uno de los pequeños placeres" que le quedan.
Si bien ella no es una gran bebedora, la fuente aseguró que disfruta cada noche de una copa de champagne antes de irse a dormir y que, generalmente, bebe un Martini durante el día.
"A la Reina le dijeron que debe dejar de lado cualquier tipo de bebida alcohólica, que suele ser un Martini", le dijo un amigo de la familia a Vanity Fair. "No es demasiado problema, ella no bebe tanto. Pero parece un poco injusto que a esta altura de su vida tenga que dejar de lado uno de los pocos placeres de los que disfruta".
En cuanto a uno de sus tragos sus preferencias, sus seguidores estarán contentos de saber que se prepara con "tres medidas de Dubonnet (N. de R.: un aperitivo a base de vino), con gin más una rodaja de limón y mucho hielo", según publicó la revista People.
En 2019, explicó que tiene gustos específicos a la hora de definir cuál es su trago preferido, y que raramente varía de lo usual. La revista detalló que la mandataria le comento al presidente de. Instituto nacional de Agricultura y Botánica: "Muy rara vez tomo vino pero escuché que es muy bueno"
