Una vez más la tragedia le pasa cerca a Estefanía de Mónaco. Se trata de su ex, Mario Oliver Jutard, uno de los reyes de la vida nocturna de Los Ángeles, -dirigió los clubes Vertigo y The Gate y elegantes restaurantes como Tryst, Le Petit Four y Linq-, fue asesinado durante un robo en su lujosa mansión en Las Terrenas, Samaná, República Dominicana.
Las autoridades dominicanas encontraron el cuerpo de Jutard en el interior de una villa en Las Terrenas, Samaná. Los informes iniciales indican que murió asfixiado y amordazado cuando delincuentes irrumpieron en su casa y se llevaron una caja de seguridad, varios relojes Rolex y otros objetos de valor. La muerte se produjo por traumatismo craneoencefálico y compresión manual del cuello (ahorcamiento).
Nacido en Francia, Mario Jacques Oliver Jutard acortó su nombre a Mario Oliver cuando comenzó a modelar en París. En 1981 se mudó a Los Ángeles convirtiéndose en el rey de la noche. Su política de puertas restrictivas atrajo a celebridades, con civiles haciendo fila fuera del club cada fin de semana, con la esperanza de entrar para pertenecer a ese mundo de VIP´s.
Oliver sufrió dos divorcios y un período de prueba suspendido por un cargo reducido de violación y agresión sexual de una niña de 19 años.
El romance entre Oliver y Estefanía de Mónaco llenó páginas de revistas
Tras separarse del actor Rob Lowe, Estefanía de Mónaco se enamoró entonces del que fuera modelo, jefe de la discoteca de moda Vértigo y catorce años mayor que él. El romance terminó cuando ella lo dejó por el productor musical Ron Bloom al año siguiente. Ella tenía 22 años y juraba que quería pasar toda su vida al lado de Oliver.
Él ya cargaba con la condena por violación y era dueño de la famosa discoteca Vértigo de Los Ángeles. Juntos llegaron a construir un nido de amor en las Islas Canarias.
