Por el deseo expreso de la reina Isabel II, según el discurso que dio durante la celebración de su Jubileo de Platino, Camilla Parker Bowles será coronada reina consorte, momento a partir del cual tendrá un papel relevante en la coronación de Carlos III de Inglaterra.
Hay una enorme expectativa en torno a la ceremonia, que no se produce desde hace setenta años, cuando Isabel II asumió el mandato, en febrero de 1952.
Al igual que sucedió con los entonces duques de York, padres de la Reina Isabel, en el año 1937, Camilla caminará junto a Carlos en la abadía de Westminster y será coronada justo después de él por el arzobispo de Canterbury. Está previsto que se utilicen las mismas joyas que llevó la madre de la reina Isabel, que llevó una corona que se hizo específicamente para ella y que permanece desde el año 2002 custodiada en la Torre de Londres..
Esta no sería la primera vez que la hoy duquesa de Cornualles luzca joyas de la Reina Madre, sino que ya lo hizo en varias ocasiones durante los años que lleva casada con Carlos.
La corona de la Reina Madre está hecha de platino y fue una creación de Garrard. Cuenta con 2.800 diamantes, entre los que destaca el Koh-i-Noor, una piedra de 108 kilates que fue entregado a la Reina Victoria por el sultán turco Abdul Medjid como agradecimiento por el apoyo en la Guerra de Crimea.
Este diamante formó parte de las coronas de las anteriores consortes, la reina Alejandra y la reina María, para quienes oportunamente se elaboraron coronas nuevas.
Pero no será la corona la única joya que lleve Camilla, sino que es más que probable que también porte el llamado “anillo de la reina consorte”, realizado en oro con diamantes y rubíes engarzados. Fue confeccionado en 1831 para la coronación de la reina Adelaida, tía de la reina Victoria. Es cierto que en cada coronación, los ritos cambien de una consorte a otra, pero en este caso es previsible que Camilla siga las pautas de la reina madre.