Lila Moss develó abiertamente su enfermedad, desde los 8 años padece diabetes tipo 1 y declaró que al ser una afección que no es "visible desde el exterior ni puede detectarse con solo mirar a alguien" prefiere visibilizarla.
Cada vez son más los pacientes que llevan un dispositivo como el de la modelo, así como otros sensores, catéteres, puertos o bombas. Sin embargo, hasta la fecha muchos, sobre todo los más jóvenes, prefieren ocultarlo bajo la ropa, especialmente en ocasiones especiales. Por ello, Lila Moss quiere mostrar su uso y concienciar a la población sobre esta enfermedad.
En sus redes sociales, la modelo subió una foto lookeada con un vestido de satén con estampado barroco, zapatos con taco dorado con el logo de Fendi y una cartera micro Baguette en cuero negro de la colección Versace inspirado en el mundo de Fendi y un llamativo dispositivo en su brazo: un sensor de glucosa conectado que detecta y mide el nivel de glucosa en la sangre.
Con esta imágen, a sus 19 años vuelve a visibilizar la diabetes una vez más y reafirma su posición como uno de los rostros que más y mejor están visibilizando esta enfermedad en el mundo de la moda.
Lila Moss ya desfiló y pasó por la red carpet con su sensor de glucosa
Esta campaña tiene su origen en la pasarela Fendace, que el pasado mes de septiembre del 2021, reunió a dos de las casas más emblemáticas del lujo italiano. La modelo británica e hija de Kate Moss, apareció en la pasarela con su bomba de insulina colocada en la pierna en un momento que ella misma definió como "épico".
En la pasada edición de la gala Met lo hizo por partida doble. Bajo su vestido de Burberry repleto de transparencias, la joven dejó al descubierto tanto su sensor de glucosa como su bomba de insulina. Mientras que el primero permite medir los niveles de glucosa de forma continua, la bomba ejerce como una especie de páncreas artificial liberando en el organismo la insulina necesaria para el buen funcionamiento del cuerpo.