Desde su rincón favorito para hacer calls al mundo, Meghan Markle deja que espiemos un poco su casa. Ella eligió una de las esquinas de su gran living como espacio para hacer home office.
Tiene un escritorio estilo mesa, con patas torneadas, flores recién cortadas, un pedazo de mármol blanco como decoración y dos sillas vestidas en color nude sobre una alfombra de fibra. Sobre una de las sillas descanda una manta Hermès y en la esquina, al lado de la ventana, un ficus pandurata se adueña del ambiente. Detrás de Meghan descansa Guy, su beagle, sobre un almohadón a rayas.
Así era el mismo rincón antes que Meghan metiera mano en la redecoración de la casa. Se puede ver la chimenea con la misma tapa de hierro trabajado y la ventana.
Meghan ubicó su notebook sobre una pila de libros para darle altura. Junto a las flores, tiene varios retratos familiares sobre el escritorio. Ella quiere tener cerca a sus hijos mientras trabaja. Un marco triple de imágenes en blanco y negro muestra una foto de Harry besando a Lili en el centro, así como una foto de Archie abrazando a Meghan.
Otro de los rincones que se pudo espiar de la casa de Meghan y Harry en Montecito es el living. Los sillones están enfundados en off white y acompañados de almohadones rayados. Detrás de Meghan se pueden observar flores frescas (de nuevo), velas decorativas y varios libros coffe table. Un trío de obras de arte cuelgan de la pared detrás.