Este sábado, Marco Antonio Caponi (38) confesó el lado B de personificar a Roberto Sánchez en la serie Sandro de América, lanzada en 2018. Lo hizo durante el programa "PH, Podemos Hablar", conducido por Andy Kusnetzoff. Allí, el actor aseguró que fue uno de los grandes desafíos de su carrera, debido a que se comprometió tanto con el papel que puso en peligro su salud.
"Interpretar a Sandro fue muy neurótico y muy complejo”, consideró Caponi, quien debió subir varios kilos para ponerse en la piel de El Gitano. Sin embargo, comenzó a aumentar de peso de forma considerada al punto que, al concluir la serie, seguía subiendo kilos. "Tuve varias recaídas. Cuando terminé de hacer Sandro y cuando iba a nacer Valentino (su hijo), estábamos mimetizados con mi mujer (Mónica Antonópulos)”, bromeó.
Este aumento desmedido de peso le trajo lamentablemente consecuencias a largo plazo. "Llegué a pesar 117 kilos, que me trajeron varios problemas. Ahora estoy con la rodilla lastimada, porque venía de pesar 80 kilos”, se lamentó. A esto se le sumó que, durante el período que duró la serie, también tuvo que consumir cigarrillos más de la cuenta.
"Fumaba mucho. Me iba a mi casa con sensación de descompostura. Cuando grabás, fumás cigarillos de salvia, que es mucho peor. Tenía una toma a las 10 de la mañana y ya me había fumado como 15 cigarillos. Estaba pasándola mal", reconoció Caponi, quien recordó esta etapa con algo de desagrado.
Durante 2020, el actor logró volver a su peso con ejercicio, asesorado por su hermana, que es profesora de educación física y manteniendo una dieta equilibrada. A través de sus redes sociales, fue compartiendo su transformación físico con actividades que iban desde running hasta levantamiento de pesas y bicicleta.