En las últimas semanas, la muerte de un tercer cuervo en la Torre de Londres generó mucha preocupación entre algunos sectores de la sociedad británica. Este hecho, despertó temores relacionados con una antigua profecía que vincula la supervivencia de la monarquía británica.
La muerte de este cuervo, llamado Gripp, ocurrió en circunstancias inusuales: su cabeza quedó atrapada en su jaula antes de ser atacado por otras aves. Se trata del tercer cuervo que muere en los últimos tres años, uniéndose a Erin, fallecido en agosto de 2022, y Rex, que murió en septiembre de este año.
Los cuervos de la Torre de Londres son los grandes protagonistas de una antigua leyenda que tiene siglos y que, hoy en día, sigue generando especulaciones sobre el destino de la monarquía británica.
El último en fallecer fue Gripp, quien murió con la cabeza atrapada en su jaula antes de ser atacado por otros pájaros. Los otros dos cuervos, Erin y Rex, murieron en agosto de 2022 y septiembre de 2024, respectivamente. Muchos temen que la desaparición de estos emblemáticos pájaros pueda desencadenar el cumplimiento de la oscura profecía.
La profecía detrás de los cuervos de la Torre de Londres
La historia detrás de la relación entre los cuervos y la Torre de Londres remonta al reinado de Carlos II, el tatarabuelo del rey Carlos III, quien gobernó Inglaterra desde 1660 hasta su muerte en 1685. Según la leyenda, el monarca escuchó una advertencia que aseguraba que si algún día los cuervos abandonaban la torre, esta se derrumbaría, llevándose consigo al reino.
Desde entonces, se convirtió en una práctica establecer la presencia de al menos seis cuervos en el lugar. Los guardias de la torre, conocidos como Yeomen Warders, son los responsables de garantizar el cumplimiento de esta tradición.
Con el paso del tiempo, los cuervos adquirieron nombres y se convirtieron en importantes presencias tanto para los visitantes y el personal de la Torre. Actualmente, además de los fallecidos Gripp, Erin y Rex, los cuervos que permanecen en la torre son Jubilee, Harris, Poppy, Georgie, Edgar y Branwen. Sin embargo, la reciente pérdida de tres de estas aves en tan poco tiempo ha alimentado el temor de quienes creen que la leyenda tiene un significado más profundo.
El maestro de los cuervos y su rol fundamental
Michael “Barney” Chandler, conocido como el “maestro de los cuervos”, es el encargado de cuidar a estas aves en la Torre de Londres. Chandler, un excomandante de los Royal Marines, junto a su equipo de cuatro personas, es el encargados de alimentar, vigilar y cuidar a estos emblemáticos animales.
Con el tiempo, Chandler desarrolló un vínculo profundo con las aves, a las que describe como criaturas extremadamente inteligentes. A cada una le atribuye una personalidad propia que, según él, los visitantes pueden observar durante las visitas a la Torre de Londres.
La conservación de los cuervos
Los cuervos de la Torre de Londres viven en un entorno controlado que les permite superar con creces la expectativa de vida de sus congéneres en estado salvaje. Mientras que en libertad estos animales pueden vivir entre 10 y 15 años, en la torre pueden alcanzar los 20 años o más.
El cuervo más longevo que habitó el lugar vivió hasta los 44 años. Para garantizar que no abandonen el recinto, los guardianes recortan algunas plumas de sus alas, lo que limita su capacidad de volar a grandes alturas.
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