"Hablemos menos cuarto, cuando vuelvo de dejar a Alfon en el jardín". Las directivas son precisas y nos preparan para una charla amena y lindísima donde Brenda Gandini, una de las actrices del exitoso elenco de la obra "Desnudos", suceso del verano porteño post pandemia que en breve saldrá de gira por todo el país, va a hablar de todo: la maternidad, la vida en pareja con Gonzalo Heredia, su compromiso con la ecología y el reciclaje y también de cómo es ser la hija de Daniela Cardone. Ese detalle no menor -admitirá después- no le facilitó tanto el trabajo sino que, por momentos, hasta le cerró puertas.
-¿Cómo estás Brenda, comenzando el año lectivo de tus hijos, Eloy y Alfonsina, y en pleno éxito de "Desnudos"?
-La verdad es que estoy muy bien, teniendo en cuenta de dónde venimos y que se reactivó la temporada teatral después de la pandemia. Pensá que nosotros en 2019 nos habíamos ido a Mar del Plata a hacer "Desnudos" y teníamos pensado terminar en Buenos Aires a fines de 2020... Pero bueno, si hay alo que nos trajo esta pandemia es aprender a tomar conciencia de que no sabemos qué puede pasar mañana. Ahora estamos transitando una temporada teatral increíble. Que la gente haya elegido ver la obra y tener las devoluciones que tenemos, nos hace sentir muy afortunados. Estoy muy contenta.
Y que hayan empezado las clases después de dos años de escolaridad a distancia, con los chicos en casa, también te hace tomar conciencia de lo importante que es la escuela, el lugar donde ellos se encuentran y juegan con sus pares, y donde aprenden con docentes que estan capacitados para enseñar... Porque como padres nos encontramos muchas veces con momentos en los cuales decíamos "¿y ahora cómo le explico esto, cómo hago?". Con la pandemia valoramos más la presencia de las personas que forman parte de la educación de nuestros hijos en el aprendizaje... ¡Así que muy bien también con este tema!
-Percibo como que hay una toma de conciencia de disfrutar el día de hoy…
- Sí. Yo soy una persona muy ansiosa, que necesita estar viviendo todo cuando quiero, y la verdad es que no puede ser así, porque uno no sabe en realidad lo que va a pasar mañana. Está buenísimo tener proyectos y planes, pensarlos y diagramarlos. Pero también está bueno tener conciencia de que el día que estamos viviendo no vuelve... Por eso, mi día a día es ese: vivir hoy.
-Hablame de tus hijos.
-Eloy tiene 10 años y yo creo que todo esto adelantó un poco la preadolescencia... El era más extrovertido pero se está volviendo para adentro. En cambio Alfon es más artista, más para afuera, no tiene temor al ridículo, que puede ser una cosa de la edad... Con Gonzalo los estamos acompañando a descubrir desde chicos sus pasiones, mostrándoles los caminos y que ellos vayan eligiendo lo que más les gusta. Pero la verdad es que no tengo idea para que lado podrían ir… Cada año me van sorprendiendo y es como que soy testigo de eso. Pero si los tendría que definir, diría que son niños muy felices y eso me llena de amor; los veo bien y es como tener lleno el corazón.
La maternidad, antes y después
-¿Te cambió la maternidad?
-Sí, la verdad es que la maternidad me cambió y realmente respeto a las mujeres que eligen no ser madres, porque la maternidad implica un cambio de vida rotundo en muchos aspectos. Yo creo que la mujer es la que más relega su vida, que deja cosas de lado y la que tiene que postergar proyectos, porque es fundamental la presencia de los padres durante los primeros años y sobre todo para que los niños se sientan amados.
Pero la verdad es que la maternidad me ha cambiado en muchos aspectos porque me hizo poner el foco en las cosas más importantes. También me ordenó un poco, porque cuando sos mamá tenés que aprender a organizarte y no perderte... a veces la maternidad te lleva entregarte absolutamente a tus hijos y un poco te perdés en lo que a vos te gusta. Lo que siempre digo es que mis hijos van a crecer y el día de mañana no quiero sentirme perdida. Quiero acompañarlos pero también quiero tener mi vida y poder trabajar de lo que me gusta, haciendo un equilibrio.
-¿Tendrías más hijos?
-Bueno me encantan los chicos, especialmente cuando son bebés. Eloy ya está en una etapa que se empieza a poner más intenso y pienso en que es una aprendizaje para los dos... y Alfon ya me está pidiendo espacio y pienso que ya no me quedan más bebés... Pero la verdad es que no. Ya tengo niño y niña y quiero volver a enfocarme en lo que dejé postergado en su momento cuando fui madre, además de acompañarlos en su crecimiento y educación… Igual nunca hay que decir nunca porque no sabés con lo que te podés encontrar…
La vida en pareja
-Hablando de tu vida en pareja con Gonzalo, hace pocas semanas dijeron que se llevan mejor trabajando que en casa... ¿Seguís pensando que es así?
-Lo que decimos es que en el ámbito laboral no está lo cotidiano, lo que está en casa, donde a veces la rutina y las responsabilidades familiares hacen que la pareja no se encuentre todos los días. En el trabajo la pasamos bárbaro, nos llevamos muy bien con nuestros compañeros, nos divertimos mucho más porque no están las responsabilidades familiares, eso.
-Se habló mucho de que te ibas a casar... ¿Vas a usar el vestido de tu mamá?
-Sí, tengo el vestido de casamiento de mi mamá y el de mi abuela y soy una persona que recicla la ropa, creo en reutilizar las cosas y no tanto en el consumo nuevo, creo que están buenísimas las ferias y encontrar ropa usada, que cada prenda tiene una historia. Pero no usaría el vestido de mi mamá para casarme porque este vestido ya tiene otra historia. Yo viviría mi historia con un vestido nuevo que me haría o tal vez me hago uno reciclado con otras telas, no lo se… pero no me casaría con el vestido de mi mamá. Y lo del casamiento es algo que venimos postergando por la pandemia y por el trabajo, así que decimos que alguna vez lo vamos a hacer, pero no sabemos cuándo.
-¿Pero está el plan de casarse?
-Sí, más que casarse es como una celebración de lo logrado, de encontrarnos compañeros, de esta relación que formamos hace ya once años y es celebrar eso, el amor.
-¿Qué te enamora de Gonzalo?
-Me enamora él, su personalidad, su perseverancia, que va para adelante con sus proyectos, que lo admiro, me parece que la admiración es algo que tiene que estar. Y me enamoran un montón de cosas que no las voy a decir…
-El está muy metido con su proyecto literario.
-Sí, ya escribió dos novelas y participa de un programa de radio donde hablan de libros. Está muy metido, es su gran pasión, lee mucho, está muy abocado a eso y tiene un montón de proyectos.
Las fotos de su casa
-Hablando de tu casa, publicás muchas fotos mostrando ambientes, ¿te ocupás vos misma de la decoración?
-Qué bueno que me preguntás eso porque se han publicado fotos que no son de mi casa... porque aprovecho lugares lindos para sacarme fotos y subirlas a Instagram...
-Sí contaste que sos fanáticas de las plantas, los libros y los animales...
-Si eso sí, me volví fanática de las plantas y la pandemia me trajo mucho con la tierra y también con lo ecológico. En mi casa está lleno de plantas y todos los animales son bienvenidos. Y la decoración es algo que me gusta y también meterme con el reciclaje. Me gusta pintar, así que de repente te reciclo un banco o un sillón que está feo lo pongo a nuevo. No soy de tirar, soy más de reconvertir.
La infancia en Cipolletti
-En cuanto a tu infancia, te criaste en Cipolletti, provincia de Río Negro, con tu papá y con tu niñera, Pato, ¿no es verdad?
-Claro, Pato era mi niñera porque mi papá trabajaba mucho, mi mamá se había venido a Buenos Aires a trabajar y cuando no venía a visitarla, tenía niñera… como mis hijos, que también tienen niñera así yo me puedo ir a trabajar… Y despues Pato terminó siendo la mujer de mi papá, pasados muchos años y tengo un hermano fruto de esa relación.
-¿Cómo fue tu infancia en esa ciudad?
-¡Hermosa! Tengo recuerdos de Cipolletti que los siento muy vivos todavía. Viví 18 años allá, tengo todas mis amiga, todo mi círculo y mis vínculos están allá, por eso viajo mucho... Justo mi papá falleció el año pasado así que es medio difícil volver ahora, estoy como procesando esa información, pero tuve una infancia muy feliz. También viajaba mucho a Buenos Aires para acompañar a mi mamá, iba con ella a su trabajo. Pero la verdad es que tengo recuerdos hermosos.
-¿Cuando y cómo descubriste que querías ser actriz?
-Fue cuando me convocó Cris Morena. A los 18 yo estaba un poco perdida, había empezado a estudiar diseño de indumentaria, después me pasé a administración de empresas y en un momento mi mamá me cuenta que la habían contactado de una agencia porque me querían de modelo. Ahí empecé a sacarme fotos y cuando me llamó Cris (Morena) para hacerme un casting, quedé para formar parte de Floricienta y además empecé a estudiar y formarme para eso. Tenía 19 años y en ese momento me di cuenta que esto era lo que me gustaba, que era algo que tenía como tapado. Porque de chica yo era muy histriónica, mi mamá y mi papá me decían que me gustaba bailar y disfrazarme... Así que me reconecté con todo eso que, evidentemente en la adolescencia lo había guardado.
Pro y contras de "ser hija de"
-¿Pesó o ayudó ser hija de Daniela Cardone?
-Las dos cosas porque primero, aunque seas "hijo de", y si bien podés tener la fama más a mano, no es así con el trabajo. Además muchas veces me han dicho que no por ser hija de mi mamá, por prejurzgarme, por pensar que venía de tal o cual palo. Y además, todo lo que hice lo conseguí haciendo cástings, después de estudiar y preocuparme. Pero sí, por ser hija de una modelo super conocida, quizás la fama me llegó más rápido.
-¿Cómo es Daniela Cardone como abuela?
-¡Es lo más! Mi mamá es como muy moderna en el sentido de que no es una abuela común. Es una abuela muy joven y conecta con mis hijos a través de la música, el juego, van construyendo su relación, yo ahí no me meto. Ella es muy lúdica y está bueno verla con mis hijos.
-¿Y como mamá?
-Yo creo que estamos en el mejor momento de la relación, porque una cuando es madre comprende a sus padres y aprende a no juzgar. Lo que me pasa con mi mamá lo veo con mis hijos, el día de mañana ellos me van a decir: "¿mamá vos hiciste esto?" Y bueno chicos, hice lo que pude... Y la verdad es con mi mamá hoy tenemos una relacion más unida, somos más compañeras.
-¿Ella era estricta?
-No, super liberal. Mi papá era mucho más estricto, eran como dos polos opuestos.
La desnudez y el tatuaje con letras chinas
-En "No es tan tarde", el programa de la medianoche de Telefe, contaste que como ella te llevaba a una playa nudista entonces no te inhibe la desnudez…
-Si, la verdad es que no tengo un tema con eso. Y además mi mamá siempre ha sido una persona que no tuvo problemas en mostrar su cuerpo. Yo no le pongo la carga que la gente suele poner cuando ve a una persona desnuda. Además, al ser actriz el cuerpo es un instrumento.
-También contaste una anécdota sobre un tatuaje con letras chinas, que no dice lo que vos pensabas que decía...
-Si, hubo un tiempo que estaba de moda hacerse un tatuaje con letras chinas, me tatué algo que tenía un significado sentimental para mi en ese momento. Fui con una amiga y al tiempo a ella en el Barrio Chino le dijeron que el tatuaje decía arroz con pollo. Yo no lo podía creer y fui personalmente a preguntar y me dijeron lo mismo. Pero en No es tan tarde estuvo la chef china Karina Gao y explicó que en el idioma chino no existen letras sino grafismos que expresan símbolos. Y me dijo que no tenía tatuada la frase arroz con pollo, tampoco las iniciales que yo había pedido... sino que eran símbolos que indicaban corriente de agua, mujer y literatura, algo así.
-¿Cómo te ves de acá a diez años?
-Ay, no lo se... y no lo imagino mucho, porque me gusta que la vida me sorprenda. Sé que voy a ser otra en diez años porque voy cambiando todo el tiempo en mi forma de parecer. Sí me gustaría ser como siempre buena persona, pero ni idea dónde voy a estar y si voy a estar acá.
-¿Qué sueño tenés para tu profesión?
-¡Estoy llena de sueños! Me gustaría viajar con mi trabajo, que ahora se nos va a dar con la obra, con "Desnudos", que vamos a hacer una gira por el pais, cosa que nunca hice... Y sueño con hacer películas con directores que admiro, trabajar en otros países, con otras culturas, compartir viajes con mis hijos... estoy llena de sueños.
-¿Y a nivel personal?
-Siempre sueño con estar bien, con tener salud para poder cumplir con todo lo otro.
Fotos: Chris Beliera.
Producción y estilismo: Sofía Pérez y Santía.
Contenido multimedia: Manuel Adaro.
Maquilló: Carol H. para Frúmboli Estudio (@carolhmakeup).
Peinó: Nacho López Fagalde con productos Kérastase para @vardomanagement.
Agradecemos a: Croque Madame Palacio Paz por la locación (@croquemadamepalaciopaz), Paruolo, María Gorof y Ginger.