Este viernes se desató una ardua batalla twittera entre Doja Cat y sus fans latinoamericanas, que terminó con la cantante estadounidense amenazando con abandonar su carrera musical.
Resulta que la rapera vino a la región para presentarse en las distintas ediciones del Lollapalooza. Pero en su llegada a Paraguay las cosas comenzaron a complicarse. Al arribar al aeropuerto de ese país, se tapó la cara por completo (entre gorra y barbijo) y no quiso saludar a nadie, actitud que contrastó muchísimo con la de otros artistas, o con la mismísima Miley Cyrus durante su estadía en Argentina.
Ya instalada en su hotel, en ningún momento del día se asomó por el balcón o por la entrada -como es de costumbre- a saludar a sus fans que esperaban ansiosamente bajo la lluvia verla aunque sea por un instante.
Lamentablemente, el Festival Asunciónico donde la artista se iba a presentar -al igual que Foo Fighters, Machine Gun Kelly y otros- se canceló por el fuerte temporal e inundaciones en la capital paraguaya. Debido a este improvisto, algunos de los performers improvisaron mini shows en la calle, como una forma de compensar a sus fans. Pero Doja eligió cantar en privado en la terraza del hotel, a puertas cerradas, y hasta habría pedido que nadie se saque fotos con ella.
Pero el verdadero problema se desató días después, tras su presentación en Brasil, donde ella misma pidió diculpas por no dar su mejor actuación. Fue entonces que la compositora de 26 años expresó su descontento en Twitter porque sus fans de Paraguay no la habían ido a despedir tras el festival cancelado. "Hubo una tormenta en Paraguay y el show se canceló. Cuando me fui la mañana siguiente no había ni una sola persona fuera del hotel esperando por mí. Supérenlo", sentenció la cantante en un polémico tuit que después borró. Incluso aseguró que se arrepentía de haber estado todo el día preparándose para el recital, y que no pensaba pedir perdón.
Sus fans paraguayas se enfurecieron por esa actitud, porque habían estado todo el día (cuando llegó a ese país) esperándola, y ella nunca se asomó a saludar. También la criticaron porque -a diferencia de sus colegas músicos- no publicó nada en sus redes sociales sobre el show que no pudo ser. Para colmo, la artista le habría dado like en la red del pajarito a un tuit que decía que si la gente de Paraguay no tenía dinero para darle de comer a sus hijos, qué negocio hacía para asistir a un concierto.
Así comenzó la cancelación latinoamericana a Doja Cat...y hasta la mismísima cuenta del Mercosur se expidió al respecto. Por su parte, ella sostuvo que no piensa seguir aceptando fotos con fans después de este tour, y hasta aseguró que va a retirarse: "Dejo la música, tengo unas ganas que me muero de desaparecer y ya no necesito que crean más en mí. Todo está muerto para mí, la música está muerta y soy tonta por pensar que estoy hecha para esto. Esto es una maldita pesadilla. Esta m.... no es para mí, así que me voy. Cuídense todos".
¿Quién es Doja Cat?
Su verdadero nombre es Amala Ratna Zandile Dlamini y nació en Los Ángeles el 21 de octubre de 1995. En 2012 lanzó su primer sencillo, "So High" bajo el nombre artístico de Doja Cat, y dos años después firmó contrato con RCA Records.
Su primer EP fue "Purrr!"; en 2018 le siguió su primer álbum de estudio, "Amala", y en noviembre de 2019 fue el turno de "Hot Pink", que incluye el hit "Say So", que logró el número uno en el Billboard Hot 100 con la versión junto a Nicki Minaj en mayo de 2020.
Se destaca como cantante, compositora y productora, y viene de una familia de artistas. Su papá, Dumisani Dlamini, es un actor, compositor y productor de cine sudafricano conocido por el musical "Sarafina!", de 1992. Su mamá, Deborah Elizabeth Sawyer, es pintora, y su abuela también era artista.
Ésta no es la primera polémica a la que se enfrenta. En 2020 fue acusada de racista por su canción "Dindu Nuffin", en donde critica la reacción de la comunidad afrodescendiente ante la violencia policial.