Diario de un gigoló es una de las series más vistas en Netflix desde su estreno. Una serie de suspenso erótico, que fue producida por Televisa y por Underground (la productora de Sebastián Ortega), rodada en Buenos Aires.
Jesús Castro, su protagonista, oficia de un joven con un pasado difícil que comienza a ganarse la vida como escort (un seductor de mujeres adineradas) dentro de la organización comandada por Minou (la nominada al Oscar Adriana Barraza), quien quien esconde su quehacer bajo la fachada de una exclusiva galería de arte.
Lo cierto es que, hasta ahora, no se conocía demasiado del actor nacido en Cádiz hace 29 años, ya que se podría decir que comenzó a llamar la atención internacionalmente -sobre todo- con esta serie de la plataforma de streaming.
Los comienzos de Jesús Castro
Durante su adolescencia, Jesús comenzó a trabajar en el negocio familiar: una churrería que pertenece a su padre porque quería comprarse una moto y su papá le dijo que se la tenía que ganar y, por ese motivo, se puso a ayudar en el local.
Tiempo después probó suerte en un boliche, en donde hacía Relaciones Públicas. Pero tampoco era lo suyo y decidió dedicarse al oficio de electricista, ya que había estudiado la carrera de Electrónica en el Instituto de Educación Superior La Janda. Visitaba casas particulares realizando todo tipo de arreglos.
Mientras tanto, probaba suerte como futbolista, pero nunca logró alcanzar las grandes ligas. “Cuando no das el salto con 16 o 17 años ya sabes que no; y hasta ese entonces, no fumaba ni bebía para el sábado, día del partido, estar bien físicamente”, comentó hace algunos meses en una entrevista.
Cómo llegó a la actuación Jesús Castro
El español saltó a la fama en su país cuando protagonizó El Niño (2014), película por la que estuvo nominado al Goya a mejor actor revelación.
Si bien se decía que fue elegido para la película por casualidad, explicó cómo fue que llegó ahí en una entrevista: “En principio, sí me iba a presentar al casting y fui con un amigo, pero una vez que ya estábamos para entrar, vi que la mayoría eran chicas y me dio un poco de reparo y dije: ‘Yo no entro aquí ni de coña’, e hice un amago de irme. Pero entonces Eva Leira y Yolanda Serrano, las directoras del casting, me dijeron: ‘Perdona, ¿tú dónde vas?’, y yo les dije: ‘No, es que se me ha quedado una tarea pendiente’. Ellas: ‘No, ni tareas ni nada, suelta la mochila y tira para dentro’. Así que solté la mochila y aquí estamos. Menos mal que me lo dijeron, si no, no habría entrado”, señaló en una entrevista a Vanity Fair en agosto de 2014.
Tras su debut y gran interpretación en la película, fue convocado para el largometraje “La isla mínima” (2014). Luego apareció en la segunda y última temporada de la serie “El Príncipe” (2015-2016), le siguieron “Mar del plástico” (2015), “Perdóname, Señor”, (2017), “La reina del sur 2″ (2019), entre otras producciones.
Cómo vivió Jesús Castro sus días de rodaje en Buenos Aires
El actor reconoció en una entrevista que dio a Diez Minutos (en enero de este año) que no fue nada fácil grabar lejos de su país natal. “Está siendo muy enriquecedor la verdad. Echas de menos tu tierra, tu familia, tu gente, pero esta aventura latinoamericana me está dando muchas cosas y me quedo con eso”.
En cuanto a su decisión de formar parte del proyecto, dijo: "El personaje me atrapó desde el primer momento y le vi unos matices que probablemente no tenían nada que ver con lo que había hecho hasta ahora. Además, estoy disfrutando mucho de este salto a Latinoamérica y estoy muy contento".
En cuanto a su vida personal, es bastante reservado y, por ahora, disfruta de la compañía de su mascota Zeus, con quien posa en sus redes sociales y le muestra todo su amor.