Este viernes en Socios del espectáculo, el enigmático fue nada menos que Leo Sbaraglia, que fue visto muy cerca de una bella actriz brasileña que sería su nueva novia. Según contaron Adrián Pallares y Rodrigo Lussich, Julia Konrad, de 31 años, sería quien acompaña sentimentalmente al actor de 52 años.
Separado de Guadalupe Marín desde 2017, con quien tuvo a su única hija Julia, a Sbaraglia no se le han conocido parejas desde entonces. Ahora, él no ha blanqueado aún pero según contó Luli Fernández en Socios, la pareja asistió a un estreno en Buenos Aires, en el Método Kairós, en la noche del jueves. Y si bien en la imagen que se difundió no aparecen tomados de la mano ni parados uno al lado del otro, Luli afirmó que según fuentes, ellos estarían viviendo un romance.
Quién es Julia Konrad, la novia de Leo Sbaraglia
Julia Konrad Viezzer, tal su nombre completo, es una actriz, cantante y activista por los derechos de la mujer brasileña. Es conocida por su papel protagónico como Gabriela, en la serie de Netflix "Invisible City", y por su papel como Pepita en la serie nominada al premio Emmy Internacional "One Against All".
Nacida en Recife, Pernambuco el 6 de agosto de 1990, se mudó de niña a Buenos Aires con su familia, donde vivieron durante diez años. Después de graduarse de la escuela secundaria, Julia se mudó a Nueva York para estudiar artes escénicas, donde vivió durante tres años, especializándose en teatro musical en la American Musical and Dramatic Academy en 2012, donde fue compañera de clase de los actores Madeline Brewer y Jeremy Pope.
Durante su estancia en Estados Unidos participó en el largometraje independiente "Allure" en 2014, del premiado director serbio Vladan Nikolic. También trabajó en "Estonia", película que fue nominada a "Mejor película norteamericana".
En 2020 Julia habló públicamente por primera vez sobre ser sobreviviente de abuso sexual y comenzó un movimiento que da voz a los sobrevivientes. Después de que su historia fuera publicada en una importante publicación de mujeres en Brasil, otras actrices dieron a conocer sus propias historias de abuso, y la publicación estableció un canal permanente para que las mujeres de todo el mundo pudieran compartir sus propias experiencias y obtener información legal y psicológica.