Maite Peñóñori se despidió este jueves del equipo de LAM. La panelista se emocionó hasta las lágrimas frente a sus compañeros y dijo que "el equipo que comanda Ángel de Brito es todo" y le permitió aprender y formarse en su trabajo. Si bien no contó a dónde se va, Maite reveló que sintió que había llegado el momento de cerrar un ciclo y que se encantó formar parte de Los ángeles de la mañana.
Quién es Maite Peñóñori
Casada con Martín Pietruszka, Maite nació el 17 de octubre de 1991 en Caballito, se crió en Villa Ballester y actualmente vive en Colegiales. Conoció a su marido estudiando locución y se formó en la profesión trabajando en la calle, haciendo móviles para diferentes medios. "No tengo el complejo de cronista que quiere ser panelista. Creo que en la calle te podés lucir un montón, tener una visión diferente, y Ángel (De Brito) es súper generoso porque si él no me diera ese espacio tampoco podría lucirme", contó en una nota.
Con respecto a la relación con sus compañeras del panel de LAM, las angelitas Yanina Latorre, Andrea Taboada y Mariana Brey, Maite dijo: "Me caliento cuando me provocan o me chicanean y contesto. Cada una tiene su personalidad pero son buenas compañeras".
Con respecto a su llegada al programa, la panelista recordó que, después de estar cinco meses en Nosotros a la mañana, un día su jefe la llamó. Ella pensaba que se trataba de un aumento de sueldo, pero no. "Me dijeron que estaban con reducción de presupuesto, que al día siguiente no fuera. Un mes antes había arrancado LAM, conseguí una entrevista y quedé".
Su primer móvil, según recordó en otra nota, fue una cobertura por el caso de las valijas de José López en el convento de General Rodríguez. "Me acuerdo que después de eso Ángel me llamó para felicitarme y yo no lo podía creer", dijo.
Cómo fueron sus comienzos
Mientras estudiaba locución, Maite comenzó a golpear puertas, llevando curriculums a las radios y enviando mails a productores de televisión. "Empecé escribiendo colaboraciones para el diario Compromiso, de Dolores, y mientras tanto trabaja en un estudio jurídico como secretaria. Mi primer trabajo pago en el medio fue en 2015, en Radio Uno, que se relanzaba, y lo conseguí porque le mandé un mensaje a Nancy Pazos y arranqué como cronista de ella", recordó en otra nota.
Y agregó: "Todas las mañanas cubría la conferencia de prensa de Aníbal Fernández (por entonces Jefe de Gabinete), móviles en la calle de lo que pasaba… fue un año súper intenso y aprendí un montón. Me iba en subte a cubrir las notas, era todo muy a pulmón".
Luego conoció a Fernanda Iglesias, quien la recomendó para entrar como cronitas en Nosotras a la mañana. "Venía haciendo notas para un programa de canal Metro pero aire nunca había hecho. Entonces arranqué en Nosotros… y laburaba todo el día. Ahí se dieron mis primeras entrevistas a Susana (Giménez), Mirtha (Legrand)… fue un salto enorme", recordó.
También recordó con mucho cariño a Juan Alberto Badía, con quien pudo trabajar en enero de 2012. "Fue mi primer trabajo como locutora, en enero de 2012, cinco meses antes de que él falleciera, y cuando aún existía Estudio Playa (la radio que Juan había fundado en Pinamar)", rememoró.
"(Badía) Era lo más: muy generoso y divertido. El primer día, la radio daba a la playa, y me llamó para preguntarme cómo me sentía y si tenía frío. Entonces me dijo: 'Maite, yo te necesito bien, me tenés que llegar al final de la temporada, en la Costa baja mucho la temperatura. Vamos a hacer una cosa: hoy te vas a ir antes y mañana te venís con abrigo'. Se había dado cuenta al aire, y por mi voz, que estaba cagada de frío", recordó.