Quién es María Victoria del Rosario Pardo: la joven que desapareció en Punta Rasa haciendo kitesurf este fin de semana tiene 31 años y es experta en marketing - Revista Para Ti
 

Quién es María Victoria del Rosario Pardo: la joven que desapareció en Punta Rasa haciendo kitesurf este fin de semana tiene 31 años y es experta en marketing

La joven desapareció el sábado a las 15 en el mar. Tiene 31 años y es una destacada profesional del marketing.
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"Ellla es fuerte y valiente como pocas!", escribieron en los flyers que subieron a las redes los amigos de María Victoria del Rosario Pardo. Desde el sábado a las 15, cuando se hundió en el mar en Punta Rasa, está desaparecida. Había ido a pasar el fin de semana con dos amigos a San Clemente porque le encanta practicar kitesurf.

Pero algo pasó, cayó y fue arrastrada por la corriente. Los dos amigos que se encontraban con María Victoria denunciaron que se había hundido y la habían perdido de vista mar adentro, frente a las costas de Punta Rasa. "No queremos dejar de buscarte. Recemos x ella", es el ruego desesperado de sus familiares u amigos.

Vicky en su perfil de Linkedin.

A Vicky, como la llaman, la buscan por mar y tierra. Tiene 31 años y vive en el barrio de Villa Devoto. Había llegado a San Clemente en la mañana del sábado, junto a un amigo y una amiga. En el momento en que desapareció en el mar practicando kitesurf tenía su traje de neoprene y el chaleco salvavidas, contaron sus amigos.

Ella es Victoria, la joven desaparecida en el mar, en Punta Rasa. Foto: Facebook.

Actualmente, ella es brand manager en la Bodega Luigi Bosca/L Catterton. Había estudiado marketing en la Universidad Católica Argentina, y durante un año estudió en la University of Technology de Sydney, Australia. Trabajó en Univelever con la marca Rexona, para Nespresso y para Procter & Gamble, siempre en puestos relacionados con el marketing.

Siempre aventurera. Foto: Facebook.

Siempre le gustó la aventura por las fotos que se pueden ver en sus redes sociales. En uno de sus posteos dice: "Me tomó de la mano e intentó hacerme sostener la cuerda. Estaba asustada.
Me dijo que los vientos siempre están cambiando y que las cuerdas son como los sentimientos que nos conectan con nuestra familia, con la gente que amamos. Ellos son quienes sostienen la cuerda.
Remonto cometas desde entonces".

Más información en parati.com.ar

 

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