Este jueves, Quién es la máscara tuvo un final más emotivo. Es que debajo de la máscara del personaje que fue eliminado por el público estaba nada menos que Ricardo Mollo, el marido de Natalia Oreiro.
Al verlo, la conductora del ciclo de Telefe reveló que el bolero que cantó el músico disfrazado con una máscara de dinosaurio -"Contigo a la distancia" fue el tema que él le grabó cuando ambos descubrieron que estaban enamorados.
"¡No me lo dijo, la producción tampoco, pero cuando empezó a cantar era obvio que era él!", dijo Natalia después de descubrir que Mollo estaba debajo de la máscara.
"Encima cantaste esa canción... ¿lo puedo contar?", continuó la conductora, mirando a su marido. Tras la respuesta afirmativa de él, Oreiro reveló que ese bolero tiene un significado muy especial para la pareja.
"Cuando éramos amigos, obvio que a mi él me encantaba, pero éramos amigos, hablábamos un montón y un día él se da cuenta que yo estaba muerta de amor por él y me deja en el buzón de casa un CD con esta canción, 'Contigo a la distancia' y obvio que me morí de amor", relató la conductora.
"'¡Atahualpa cuando lo vea no lo va a poder creer! Encima con el tiranosaurio rex!", agregó Natalia después al referirse a la máscara, tras besar a su marido y ante los aplausos de Roberto Moldavsky, Wanda Nara, Lizy Tagliani y Karina la princesita, los investigadores del ciclo.
Cómo nació la historia de amor de Natalia Oreiro y Ricardo Mollo
Natalia Oreiro y Ricardo Mollo conforman una de las parejas más estables y queridas del ambiente local. Respetados cada uno en su profesión son, además, artistas de larga trayectoria que han triunfado no sólo en Argentina sino también en el mundo.
Cabe recordar que Oreiro es una de las artistas argentinas extranjeras más exitosas de Rusia, donde la adoran. Y en nuestro país, tiene una larga trayectoria como actriz de telenovelas. En el caso de Mollo, es el líder de Divididos, banda de rock que nació de la disolución de la histórica Sumo, hace ya más de tres décadas.
Ahora bien, ¿cómo se conocieron Mollo y Natalia, que provenían de ámbitos tan disímiles como el mundo del rock y la televisión? La respuestas es en una clase de yoga. Hace 20 años, en 2001, ambos estaban asistiendo a un centro de esta disciplina hindú y allí se vieron por primera vez. Ella tenía 23 años y él 43.
Según relató Natalia en más de una oportunidad, fue ella quien se enamoró primero y pasó un tiempo hasta que él la mirara con otros ojos. Primero amigos, la relación se fue afianzando con consejos y charlas. “Yo me lo levanto a él (…). Me llevó dos meses convencerlo", recordó la actriz, que venía de terminar una relación de varios años con el actor Pablo Echarri.
"Cuando yo empecé a salir con él no sabía que era el cantante de Divididos, después de que empezamos a frecuentarnos sí supe, pero al principio no. Yo no escuchaba Divididos, entonces no le tenía la cara al cantante. ¡Soy un desastre!”, contó Natalia.
La actriz y cantante también relató que en una oportunidad hizo una cena para unos amigos en la que Ricardo estaba invitado. “Me pasé todo el día cocinando y cuando estuve a punto sacar la lasaña del horno me dice: ‘Me tengo que ir’”, recordó.
Finalmente, la cantante recordó que el músico se fue de viaje pero regresó a la semana a buscarla, ya que se había dado cuenta lo que sentía por ella. Pocos meses despúes, en enero de 2002, se casaron en secreto en una localidad ubicada a 400 kilómetros de Recife, en Brasil.
“Me casé con un hombre increíble y yo estaba y estoy muy enamorada. No fue secreto, fue de a dos. Es persona luminosa, creo que es la persona que más cree en mí, incluso más que yo; él me motiva mucho a superarme”, declaró por esos días la intérprete de la novela Muñeca Brava.
Una década después y cuando los seguidores de la pareja pensaban que no tendrían hijos propios -Ricardo tiene dos hijas de su primer matrimonio-, llegó Merlín Atahualpa. El pequeño nació el 26 de enero de 2012 en el sanatorio de Los Arcos, en CABA.