El 6 de febrero Nicolás Cabre cumplió 42 años y ve como los diferentes logros de su vida se fueron materializando. Si bien siempre se resguardó mucho a la hora de dar notas y hablar de su intimidad, en el último tiempo comenzó a abrirse. Es así que suele detenerse a contar algunas vivencias con Rufina, la hija que tuvo con la China Suárez y hasta comentó, en este caso, una de sus pasiones.
“No me afecta para nada la edad, pero se que ya no soy un pibe. A veces uno siente que sigue teniendo diecisiete años, y de pronto cae la ficha. Igual, por suerte, eso no pasa seguido”, manifestó en diálogo con Revista GENTE en una entrevista en la que mostró su costado más íntimo.
El actor hizo un balance de su carrera en el que reconoció que el paso del tiempo le hizo cambiar el chip con un tema muy particular. “Cuando te querés acordar, se te pasó la vida y tenés 65 años. yo cuando mire para atrás no tengo ganas de decir ‘me pase la vida encerrado en un estudio de televisión. O sea, me encanta lo que hice y no reniego de nada, pero no quiero vivir para trabajar”, confesó.
Nicolás cabré habló de su vínculo con la jardinería
Al comentar que ya no es muy salidor, dijo que hay cosas que no hace más y que se le fueron despertando otras atracciones. “Me doy cuenta que estoy con mis plantas, cuidándolas, y eso es la edad. Onda, ¡no toquen mis macetas! Yo colecciono suculentas. Hago hijitos, las regalo. Me gusta verlas y cuidarlas”, exclamó para sorprender.
Cuando GENTE le preguntó si tenía algún otro hobby inimaginable, contestó: “Creo que no. La verdad es que soy bastante tranquilo. Hoy por hoy la llevo a Rufi al colegio, me junto con los chicos con los que corre y hablamos de zapatillas, carreras, bicicletas, de cuánto nadamos…”.
