Cuando compramos una base de maquillaje tenemos que asegurarnos varias cosas para que la compra sea, lo que podemos llamar, "exitosa".
Que al llegar a casa el tono sea el que queremos, que su textura se integre bien a nuestro tipo de piel y que sea fácil de colocar, son algunos puntos fundamentales.
Después de todo, la base es uno de los imprescindibles del neceser y tiene que cumplir todos los requisitos necesarios para que queramos usarla cada vez que sea necesario y disfrutar de aplicarla sobre el rostro.
Tipos de bases de maquillaje
En el mercado existen infinidad de bases, lo importante es saber qué texturas existen y conocer tu tipo de piel, para poder encontrar la ideal para vos.
Las bases fluidas o líquidas se caracterizan por su gran versatilidad y lo cómodas que resultan de aplicar con una brocha, una esponja o incluso con los dedos.
Se funden fácilmente con la piel, garantizando un tono unificado sin esfuerzo.
Vienen formuladas para los diferentes tipo de piel, con ingredientes adecuados a cada uno de ellos (piel grasa, mixta y seca).
Por otro lado, las bases compactas ofrecen una cobertura más natural, se fijan mejor, duran más tiempo y matifican, pero aportan menos luminosidad. Idicadas para pieles parejas, y las que son con tendencia oleosa.
Las bases mousse son ligeras, tienen un bajo poder cubritivo, así que son para quienes buscan una terminación al natural.
Por su parte, la cc cream es un tipo de maquillaje hidratante que ofrece un plus de cobertura si la comparamos con una bb cream, más fluida e ideal para cubrir ligeras imperfecciones.
Finalmente, las bases en barra son usualmente de preferencia de los maquilladores profesionales, por su excelente poder cubritivo.
Cómo elegir bien la base de maquillaje
Una vez que conocemos algunas de las presentaciones más frecuentes de la base de maquillaje, es importante saber qué más tener en cuenta. Por ejemplo, ¿Cómo elegir el tono y no fallar?
"Lo más importante es encontrar tu color ideal, para esto el mejor consejo que puedo darte, es que la pruebes", aconseja Celeste González Mud, maquilladora profesional.
El día que vamos a comprarla, "es importante ir con la piel limpia e hidratada", afirma, y sugiere "probarla primero en el maxilar para ver cómo se funde con el cuello. Luego aplicarla en todo el rostro para que se funda perfectamente".
Con respecto a las texturas, "cada vez más las marcas desarrollan productos más livianos para que puedan fundirse perfectamente con tu piel".
En cuanto al tipo de piel, otro punto importante, "si es más oleosa, te recomiendo que busques una opción oil free", las formulaciones que no contienen ingredientes oleosos.
En cambio, "si tu piel es con tendencia a la sequedad, hay bases más hidratantes. Incluso hay sérums de tratamiento que, además de dar color, van a ayudar a mantener el agua de la piel durante el día", señala González Mud.
Y remarca: "Es fundamental que pruebes la base en la piel del rostro. No en la mano, porque su piel no tiene ni el mismo color ni la misma textura". Esta costumbre, antes arraigada para el testeo previo a la compra, es errónea y la responsable de que, al probarla en casa, la base no sea la indicada.
Fotos: Pinterest
Agradecemos a la make up artist Celeste González Mud por su asesoramiento.
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