Los primeros minutos de "Lo imposible" te dejan sin aliento. En un segundo, la vida de una familia de cinco cambia por completo cuando una ola gigante arrasa con todo a su paso. La película está basada en la historia real de una familia española que sobrevivió al tsunami del 26 de diciembre de 2004.
Cuando en 2012 J.A. Bayona rodó “Lo imposible” con Naomi Watts, Ewan McGregor y Tom Holland como protagonistas dio a conocer al mundo la historia de una familia que logró sobrevivir a una de las mayores catástrofes de la historia de la humanidad: la causada por la serie de tsunamis que afectó a la mayoría de los países bañados por el Océano Índico.
En aquella película, Naomi Watts interpretaba a Maria Bennet, personaje inspirado en María Belón, quien pasaba unos días de vacaciones en Tailandia junto a su marido y sus tres hijos.
María y Enrique, en compañía de sus hijos Lucas (10), Simón (5) y Tomás (8), disfrutaban de las vacaciones de Navidad en Tailandia. Fue en ese momento cuando la inmensa ola los separó y debieron luchar para sobrevivir.
La familia Álvarez Belón estaban de vacaciones en la Navidad de 2004 y milagrosamente los 5 sobrevivieron. “El tsunami fue un regalo para aprender a valorar la vida. Toda mi vida es tiempo extra. No hay ninguna diferencia entre yo, una mujer española llamada María que está viva, y miles de madres que se encuentran bajo el mar. Yo no merezco estar con vida, pero la vida no es justa. Siento dolor y compasión por tantos otros que no sobrevivieron o perdieron a sus seres queridos. Toda mi historia está en mi cuerpo. Y es maravilloso, porque significa que estoy viva”, dice María Belón.
María decidió continuar con su formación y tratar de ofrecer ayuda a las personas que lo necesitan. Trabaja como psicoterapeuta humanista y se dedica a causas solidarias. Hoy toda la familia colabora con numerosas ONGs, tras la marca que les dejó lo vivido en Tailandia.
Enrique Álvarez, marido de María y padre de Lucas, Simón y Tomás, también ha estado colaborando con organizaciones no gubernamentales. Y los hijos decidieron dejar la casa familiar para vivir su vida: buscaron becas y se matricularon en importantes universidades.
Lucas, el hijo mayor (interpretado por Tom Holland en la película), estudió Medicina y trabaja en Londres (Reino Unido).
María destaca que lo vivieron les dio la “posibilidad de sentir profundamente lo que de verdad importa en la vida”. Y además aprendió sobre la importancia de la solidaridad, haciendo “tuya la causa del otro”; el valor del sentido del humor aún en los momentos más trágicos; y la capacidad de resiliencia del ser humano frente a los problemas que nos abordan.
Tomás Álvarez tenía 8 años cuando sobrevivió al tsunami de Tailandia en 2004. Actualmente sostiene la postura de que “hay que cambiar el mundo y eso no se hace solo”. En 2018 obtuvo su título en Ciencia, Tecnología y Relaciones Internacionales por la prestigiosa Universidad de Georgetown, en Estados Unidos. El joven pasó gran parte de su vida estudiantil en América, a través de becas.
Simón, el menor de la familia “está preguntándose cada día qué profesión debe escoger para ayudar a los demás”, sentenció.
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