Córdoba es uno de los destinos más elegidos por los argentinos para veranear en este 2023: esta temporada cuenta con un gran movimiento de personas a distintos puntos del país y esto se refleja en las localidades turísticas de la región serrana.
Entre las localidades con mayor nivel de ocupación en los primeros días del año, se destacan Villa Giardino, Santa Rosa de Calamuchita y Nono. Cada una con paisajes inolvidables, actividades para toda la familia y experiencias gastronómicas únicas.
Villa Giardino
Conocida como "El Jardín de Punilla", Villa Giardino es un lugar repleto de flores y una vegetación tan abundante como colorida; a tal punto que, en el ingreso, un reloj floral es el que da la bienvenida al lugar.
Tiene una reserva ecológica natural, balneario y el camping municipal "El Portocelo", así como el arroyo Los Quimbaletes, espacios perfectos para disfrutar de un día de picnic. Por su parte, el mirador y el antiguo Molino de Thea ofrecen una vista soñada del río Grande de Punilla.
El Camino de los Artesanos es otro trayecto infaltable, donde se encuentran ateliers, casas de artesanos y restaurantes. Saliendo desde la emblemática Av. San Martín, son dos kilómetros hasta el inicio del camino. Desde allí, es un gran plan recorrer los nueve kilómetros que conectan la localidad con La Cumbre y visitar sus comercios, donde se ofrecen desde telares y obras de arte en madera, hierro y metal hasta dulces caseros y conservas.
Con múltiples ofertas en gastronomía y alojamiento, este es uno de los destinos ideales de Córdoba para disfrutar este verano.
Santa Rosa de Calamuchita
Un lugar perfecto para desconectar y dejarse llevar por la naturaleza. La ciudad ofrece una gran variedad de actividades para disfrutar en sus playas y balnearios.
Constructivamente, posee una impronta colonial, como una antigua capilla, estancias, comercios, galerías de arte y paseos de artesanos. Por las tardes, su circuito histórico se convierte en un gran plan. Entre los edificios que más llaman la atención, se destaca la Capilla Vieja, ubicada en el casco céntrico y que, con más de dos siglos de antigüedad, es un emblema de la localidad.
Además, será posible hallar una gran variedad productos regionales como la miel, destilería aromática, pastelería artesanal y fabricación de chacinados. Por la noche, la renovada costanera es un paseo casi obligado, donde también es posible ver obras de teatro y espectáculos musicales en familia o disfrutar de comidas criollas en sus restaurantes.
Para recibir a los miles de turistas que eligen este destino cada temporada, la oferta de alojamiento es amplia y variada, así como los locales gastronómicos, para todos los gustos y exigencias.
Nono
Una parada obligatoria en el Valle de Traslasierra, conocida por sus ríos cristalinos, los cuales son ideales para alejarse del estrés citadino y conectarse con la naturaleza. El río Los Sauces es ideal para los más pequeños, mientras que el río Chico es perfecto para nadar entre grandes piedras. Entre los rincones imperdibles está la "Juntura de los Ríos", donde la unión de ambos cursos forma un paisaje espectacular.
Además, hay varias opciones para hacer senderismo y cabalgatas, como el Sendero del Arroyo, el Empedrado y el Sendero de La Juntura. Otro paseo infaltable es el Museo Rocsen. Con más de 55.000 piezas en exhibición permanente, este espacio multifacético y politemático alberga una impresionante colección de objetos de diversa índole, como es el caso de una momia de Nazca, Perú, con más de 1.200 años de antigüedad.
Nono es uno de los pueblos más antiguos de Traslasierra y esto se puede ver en las construcciones del centro del pueblo: alrededor de la plaza principal, destacan las casas típicas de adobe, los almacenes de ramos generales y una capilla de 1908.