Viviana Canosa realizó una entrevista con Yanina Latorre para Infobae que fue casi una charla de amigas. Sin embargo, en un momento la conversación tocó temas delicados, como la salud. Fue cuando la periodista recordó cuando fue diagnosticada con cáncer de mama, en el año 2016.
"Yo me acuerdo algo como si fuera ayer. Martina tenía cuatro años y yo me acostaba todas las noches al lado de ella, arrodillada en su cama y le pedía a Dios y a todos los santos que por favor me diera vida para acompañarla", empezó diciendo Canosa, recordando cómo vivió los días tras el diagnóstico.
Con respecto a cómo se enteró del cáncer, la periodista contó que se palpó un bulto tras salir de bañarse.
"Bueno, salí de la ducha. Martina tenía cuatro años. Hoy tiene 11. Todavía no estaba separada pero el padre de Martina, Alejandro (Borensztein) estaba en Londres. Había ido a ver a su hijo. Mis padres estaban en el sur viendo a mi hermana menor. Estaba sola con Martina y la señora que nos ayudaba en casa. Salgo de la ducha y yo ya lo sabía", reveló. Y agregó: "Dije 'no me gusta'".
Viviana Canosa: "Me miraba en el espejo y decía acá tengo un quilombo"
"Me hice la boluda, ponele una semana porque estaban todos de viaje y me venía el cáncer, porque aparte escuchar la palabra cáncer. Me miraba en el espejo desnuda y decía acá tengo un quilombo", agregó en la misma entrevista de Infobae.
Luego, Canosa contó que tener prótesis mamaria la ayudó. "Como yo las tengo detrás del músculo, eso pudo salir. Si no hubiera tenido la prótesis detrás del músculo, capaz que no me hubiera dado cuenta nunca", dijo.
Más tarde, agregó que tras la mamografía, su médico le dijo que "era un asunto heavy" y que ella se vio "enterrada". "Hablo con el doctor y me dice: ‘Esto me parece que es heavy’. Vos ya te ves enterrada todos llorándote. Una tragedia", explicó.
"No me gusta que me tengan lástima, hice todo sola"
También contó que hizo "todo sola". "El mismo día de la mamografía me hicieron la punción y no sé qué otra cosa. Lo hice todo sola. Cuanto me pusieron fecha de operación, sólo le dije al papá de Martina y a mis padres. Recién se lo conté a todos cuando lo superé. No me gusta que me tengan lástima", añadió.
Y reveló que considera haber tenido suerte. "Yo tuve la gran suerte de que la pelota que tenía estaba encapsulada y me la sacaron entera. Limpiaron un poquito alrededor. No necesité rayos ni quimio y ahora sólo quedan los controles que si bien me los hago, no me obsesiono".
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