Connie Isla es una artista que sabe cómo aprovechar las posibilidades que la tecnología le ofrece para comunicar su mensaje. O, mejor dicho, sus mensajes. Digamos que, si solamente nos detenemos en su cuenta -sin profundizar demasiado- a simple vista podemos ver a una mujer joven talentosa, que con una dulce voz canta temas acompañada de su ukelele. Covers, claro, y también temas propios. También hace posteos junto a su pequeño perrito. Y también recetas, otro contenido que suele compartir.
Ahora, si vamos más allá, nos vamos a dar cuenta que esta manera para "decir" de Connie es sólo un vehículo, porque detrás de todo eso se esconden mensajes. Muchos mensajes, poderosos, pero comunicados de una manera tan clara y accesible, que eso es justamente, lo que la diferencia de muchos.
Es que ella busca ir más allá: no le interesa ser instagrammer como un fin en sí mismo, sino que lo usa para agitar sus propias luchas. Utiliza tres palabras para definir qué es lo que hace: "canto, actúo y activo", reza su bio en Instagram. Por eso, le preguntamos cómo influye en sus causas el hecho de tener llegada en los demás, a lo que respondió: "Influye bastante porque tener llegada implica tener una cuota mucho más importante de responsabilidad, que juega una parte muy importante en ese rol".
En una oportunidad, fue elegida Joven Destacada por Presidencia de la Nación y, además, una de las 15 personas más influyentes del mundo por Fox Entertainment, con lo cual queda en evidencia que lo que dice y cómo lo dice, es bastante llamativo y destacable. ¿Generar algo en el otro es un motor para vos? "Cien por ciento, diría que es mi motor principal, al menos en este momento de mi vida, ya sea a través de la música, de las redes, del arte, de lo que sea, es uno de mis propósitos".
Escribió y editó un libro, Más luz x favor: Tenés el poder de cambiar el mundo, que concentra gran parte de su lucha: concientización animal y ambiental, además de música (con ilustraciones propias y recetas veganas, entre otros contenidos).
Es una férrea militante veganista, por ejemplo, pero le da un enfoque social: a través de la ONG Health Save Argentina, cocina y distribuye viandas veganas a gente que vive en la calle, desde Flores hasta Belgrano, Caballito e Ituzaingó. A todas las marcas que se le acercan ahora, ella les ofrece publicidad si a cambio recibe alimentos veganos como donación.
¿Qué es lo que te inspira a vos y qué te hace sentir ser vos la inspiradora de otros? "Muchas cosas, sobre todo tener algo que decir. No escribo canciones si no tengo algo que decir y hoy en día me gusta hablar de cosas que suceden en el mundo, en los vínculos, ese tipo de cosas".
A sus 27 años podemos decir que lucha contra el sistema pero, a su vez, defiende las partes del sistema que todavía valen la pena. ¿Qué te llevó a defender estas causas en un mundo que a veces demuestra demasiada adversidad, cómo te afecta eso? "No sé exactamente qué me llevó, medio que me encontré con estas realidades que me impactaron, empaticé y decidí hacerlo sin pensarlo mucho. Creo que cualquier persona cuando empieza a informarse sobre estas cosas y toma real magnitud y conciencia de todo lo que está sucediendo se involucra. El problema es la falta de información a nivel global pero creo que eso es lo que sucedió".
Otra cuestión que la diferencia (y mucho) de la mayoría de los artistas, famosos e instagrammers que convirtieron esta red en un medio de vida es haber dejado de lado marcas (que le pagaban por mencionarlas en su cuenta) que no se acoplaban con sus causas: "Me terminé alejando de eso porque muchas empresas tenían actitudes que iban en contra de lo que yo pienso, como testear sus productos con animales o producir en talleres clandestinos", decidió entonces.Es un honor, un halago y también un incentivo muy grande. No desde un lado ególatra, sino desde el lado que está bueno hablar de estas cosas y hay gente que está dispuesta a escuchar.
¿Cuál te parece que es la clave para, realmente, hacer un cambio significativo que nos lleve a un estadio superior? "Son muchas, no hay una solución general. Pero si tuviera que decir algo, creo que es la educación, el acceso a información, el poder tener esas herramientas -también emocionales- porque no sólo hablo del colegio y ya, son herramientas varias que hacen para mí que uno tenga perspectiva desde más chico".
Hablando de cambios y de deconstrucción, ¿Cómo ves a los más chicos y cómo ves a los más grandes? "Los veo desde un punto de vista quizás medio sesgado porque solamente los veo como los veo yo, y creo que ese no es un parámetro, ¿no? Pero si tengo que decir algo desde mi opinión personal subjetiva, diría que hay de todo: hay gene más chica que está súper despierta y otra que quizás está haciendo bailes frente a una cámara todos los días. Hay gente más grande que está súper terca y otra que está cargándose un montón de causas al hombro, es muy variado".
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