Considerada la "unidad básica de la sociedad", la familia incide de una u otra manera en la formación de cada persona. Para entender hasta qué punto lo hace, es imprescindible comprender cuáles son los modelos de familia vigentes en la sociedad actual.
"La tecnología, y específicamente la tecnología en ciencia y medicina, abrió las puertas a nuevas posibilidades. No sólo habilita la maternidad y paternidad para las parejas que naturalmente tienen inconvenientes en la concepción, sino que permite otros modelos de familia, donde no necesariamente tiene que haber un padre y una madre. Lo que hace la tecnología es acompañar y facilitar un deseo que ya existía en la sociedad", señaló Natalia Fernández Peri, directora médica de WeFIV.
Madres solteras por elección
Si bien cada país y cada cultura avanzan a su tiempo, en Argentina, donde 1 de cada 10 familias son monoparentales, las familias diversas son una realidad. En este instituto de fertilidad, a nivel global, cerca de 2 mil mujeres que accedieron a los tratamientos entre 2018 y 2019, fueron madres solteras. “Lo fundamental en la crianza no es cómo está compuesta la familia sino el vínculo entre la madre o padre y los niños, la disponibilidad emocional y un contexto social apropiado para el desarrollo psíquico de los hijos”, precisó la psicóloga María Villamil, jefa de la de la Unidad de Apoyo Emocional de WeFIV.
Tomar la decisión de ser madre es una de las decisiones más difíciles en la vida de una mujer. Por eso, el acompañamiento emocional, ya sea a través de una profesional o bien de familiares y amigos, es clave para atravesar este proceso.
Tratamientos para lograr un embarazo
En cuanto a los tratamientos, existen distintas opciones para lograr un embarazo: la inseminación artificial -tratamiento de baja complejidad- la fertilización in vitro (FIV) y la técnica de FIV – PGT, que consta de un análisis genético embrionario que se realiza durante el tratamiento para la detección de anomalías en el número de cromosomas (aneuploidías).
"Actualmente la tecnología nos permite realizar una mejor selección embrionaria. Al seleccionar los embriones, la tasa de implantación mejora y la probabilidad de embarazo aumenta hasta en un 60% dependiendo de cuál sea la técnica a utilizar", explicó la Dra Fernández Peri. Cualquiera de los tratamientos a elegir, implica recurrir a un banco de semen.
El testimonio de Débora D'Amato
Débora D’Amato, periodista y madre soltera relató que "es una responsabilidad emocional, económica y moral, pero a su vez es maravilloso". Ella tomó la decisión luego de acompañar a una amiga a consultas en el centro de salud reproductiva, y señala que fue en parte “bajo la sensación que el reloj biológico me corría”. Actualmente, analizando su decisión, afirmó que “tener la oportunidad de poder elegir a través de la ciencia, traer ese amor al mundo es maravilloso”.
Mamá y mamá, papá y papá
Así como la tecnología acompaña a quienes desean encarar la maternidad sin pareja, también ha sido una gran compañera para parejas que no pueden concebir naturalmente. La Ley de Matrimonio Igualitario, en 2010, la de Identidad de Género, en 2012, y la Ley de cobertura para los tratamientos de reproducción médicamente asistida, en 2013, son herramientas que también facilitaron, a familias no tradicionales, la concreción del deseo de tener un hijo.
"Como agentes de la salud, y por sobre todo especialistas de salud en una clínica de reproducción humana asistida, apostamos por favorecer la naturalización de los diferentes modelos familiares", señaló Villamil.
El Método ROPA -o de recepción de ovocitos de la pareja- es un tratamiento pensado especialmente para las parejas de mujeres que deciden emprender una maternidad compartida. En este tratamiento se utilizan los ovocitos de una de las madres y, el embrión resultante, -mediante FIV o Inseminación Artificial- se transfiere al útero de la otra mamá, participando ambas del proceso de embarazo.
Ley de subrogación de vientres: pendiente en nuestro país
En cuanto a las parejas de hombres la situación es más compleja. "En Argentina hay una deuda a nivel legal respecto de estas familias. Es un tema pendiente el tratamiento de la Ley de subrogación de vientre, técnica que les permitiría gestar no solo a las parejas de mujeres sino también a las parejas de hombres", explicó la Dra Fernández Peri, tocoginecóloga.
Y concluyó que "es importante dar marco legal a los tratamientos médicos, ya que son las técnicas y tecnologías las que permiten que la sociedad tenga un mayor bienestar y que las personas accedamos a los derechos de manera más igualitaria e inclusiva. El deseo de maternidad y paternidad es algo único, a lo que nadie, por la razón que sea, debería tener que renunciar".