Paula Colombini fue una de las modelos argentinas más exitosas de los ´90 y logró, desde muy chica, forjar una sólida carrera que la llevó a desfilar por las principales pasarelas del mundo: Versace, Guess, Armani y Polo Ralph Lauren fueron algunas de las firmas de moda para las que trabajó.
Comenzó a modelar a los 17 y en 1991 debutó en la revista Para Ti y de ahí no paró de crecer: por su trabajo, vivió muchos años en Nueva York y en París.
Se casó a los 20 años con Patricio Colman (de quien se encuentra actualmente divorciada) y juntos tuvieron a Matilde, su única hija que hoy tiene 23 años y que a los 16 incursionó en el mundo del modelaje, protagonizando campañas de indumentaria y de make up. La adolescente cursó sus estudios en el Nothlands (de donde egresó Máxima Zorreguieta) y expresó que pretendía estudiar Abogacía o Ciencias Políticas, en la última entrevista que dio para Para Ti, en 2018.
Como para muchos, la pandemia significó un antes y un después en su vida, ya que descubrió una gran pasión: su huerta. “En medio de tanta inestabilidad, sin saber mucho de qué se trataba el COVID 19, dependiendo de la información que recibíamos, sentí la necesidad de hacer algo predecible, seguro, como plantar un tomate y que creciera un tomate. Me di cuenta que algo tan sencillo como eso me generaba mucha estabilidad,” recordaba Paula en diálogo con La Nación.
La ex modelo se metió de lleno en el mundo botánico y comenzó a plantar diferentes semillas y a experimentar con todo lo que tenía a su alcance: “Y me copé. Empecé a leer, a investigar, a hacer distintos talleres. Ahora acabo de terminar uno de producción de hongos comestibles, después hice otro sobre naturaleza para sanar. Me involucré cada vez más y empecé a crecer.”
“En un momento dado de la vida, es como que todas las cosas comienzan a encadenarse y toman un pequeño sentido. Hace 18 años tenía mi casa en un barrio cerrado con mucho jardín y ahí fue donde quise tener mi propia huerta. Me compré fascículos y empecé a experimentar. Cuando algo me gusta soy bastante arriesgada. Empecé a producir de golpe, aprendiendo un montón”, le contó Paula, en otra oportunidad, a DeRaíz.
Paula es muy activa en su cuenta de Instagram, quizás no tanto como con sus adoradas plantas, pero es allí donde da a conocer lo que cosecha y los cambios que va realizando en sus cultivos.