Hogar, dulce hogar dice la frase referida a la vuelta a casa que desde 2020 es nuestro refugio como nunca antes. Y, poco a poco, la entrada que antes era zona de paso, ahora es el lugar clave de transición del exterior al interior.
¡Bienvenidos al mudroom! Esa es la nueva frase en 2021.
El mudroom es el lugar indicado para dejar de inmediato el calzado -incluso las prendas- más expuestas al exterior y cambiarnos.
Originalmente, es un término y espacio utilizado en viviendas de campo (mudroom en inglés significa “habitación de barro”) y lugares donde la temperatura entre el exterior y el interior cambia significativamente, como en algunos sitios de Estados Unidos, Inglaterra y en el norte de Europa.
Pero en tiempos de pandemia y protocolos, el cuarto de entrada, vestíbulo o recibidor de la casa es el lugar estratégico para preparar la salida del hogar, y sobre todo asegurarnos un arribo más seguro.
Y tras la necesidad, llegaron de inmediato las buenas ideas para hacer de este espacio signo de los tiempos un sitio más funcional, cómodo y agradable.
Cómo armar un mudroom en casa
Dejar los zapatos apenas llegamos a casa es un nuevo hábito, igual que colocar a mano lo que trajimos del exterior, como mochilas, carteras, abrigos y, por supuesto, el barbijo.
El mudroom es el garante de la limpieza e higiene tan anhelada por estos días, y también será el que tenga todo listo para volver a salir, lo que también lo revaloriza como clave de la organización de la casa y su dinámica nueva normalidad.
Si la casa es compartida, el recibidor tiene que tener un espacio asignado para cada integrante de la vivienda, evitando que las cosas estén repartidas por el resto de la casa.
Así, un mudroom modelo tiene sus elementos esenciales: estantes, perchas o colgantes y un espacio para dejar el calzado. Y si tiene un asiento para ponerse y quitarse los zapatos, ¡mejor! Y si además el banco tiene espacio de guardado, ¡mucho mejor!
El espejo puede ser otro accesorio preciado del nuevo rincón estrella de la casa, pero no es imprescindible.
Y si no hay mucho lugar, la pared de ingreso a tu casa o al departamento también podrá convertirse en un mudroom a medida y sin necesidad de tanto espacio, colocando las mismas piezas -estantes flotantes, ganchos, cajones, canastos y organizadores, incluso un pequeño mueble- aplicando el almacenamiento vertical para aprovechar al máximo la pared disponible.
Otra opción es confeccionar un mueble a la medida del espacio que tengamos.
Eso si. Para armar tu propio mudroom la practicidad y comodidad deben ser el objetivo a lograr. El resto, es cotillón…
Mejor dicho, decoración, que por supuesto tiene mucho que aportar tanto para disimular tantos accesorios a la vista como para ponerle un toque de distinción y belleza -con cuadros, plantas, almohadones, mantas- y estilo a un lugar esencialmente funcional y optimizado al máximo.
Más información: parati.com.ar
