A lo largo de la historia de la humanidad, los hombres siempre se aferraron a rituales de suerte y buenos augurios en la época de las fiestas de fin de año. Cargados de valor simbólico, los rituales siempre se basan en creencias, tradiciones o religiones y están asociados a festejos o celebraciones.
Natalia Barrera, alquimista y creadora del método Alquimia Femenina, afirma que diciembre es el mes ideal para hacer rituales de buenos augurios ya que tiene la enegía propia de las fiestas de fin de año.
Cómo hacer la "carta de pedidos"
Para comenzar, Barrera afirma que ese mes es el indicado para despojarse de todo lo viejo y hacer espacio para que entre lo nuevo.
- Escribir las metas. "Antes de finalizar el año, la recomendación es escribir en una agenda o cuaderno las metas que queremos lograr para el 2021, y a medida que uno las va concretando recomiendo ir marcándalas como cumplidas", explica la especialista.
- Carta de pedidos. "Desde el 21 al 25 de diciembre hay una energía especial por el solsticio, que los cristianos representan con 'la leyenda del ángel de la vida', y los paganos llaman como Yule o Litha, palabras que en ambos casos significan 'el renacimiento del sol'. Para aprovechar esta energía es necesario hacer la carta de agradecimientos y pedidos, que es el equivalente a la cartita que cuando éramos niños le escribíamos a Papá Noel", asegura Barrera. Cómo hacerla:
- Primero se debe agradecer por todas las cosas buenas que hayan pasado en el año que termina.
- Luego, se escribirán 21 deseos: 7 peticiones para vos, 7 para personas que quieras y 7 para el mundo. "Esta carta se debe guardar hasta la próxima Navidad, momento en que se volverá a leer y luego se procederá a quemarla", afirma la especialista.
- E inmediatamente se debe reiniciar el ciclo, volviendo a hacer el ritual escribiendo una nueva carta para el año año siguiente.
Cómo pedir por dinero y bienestar
- Para este ritual necesitás una cucharada de arroz, incienso en grano, carboncillo, un trozo de tela de color anaranjado, 2 hojas de ruda.
- Preparación: En la mañana del 31 de diciembre, encender un carboncillo y sobre él colocar el incienso en grano. Pasar sobre el mismo la cucharada de arroz, bendiciendo el momento, tres veces. Confeccionar a mano una bolsita de 6 x 6 cm con la tela color naranja. Colocar dentro la cucharada de arroz y las dos hojas de ruda. Cerrar la bolsita con hilo del mismo color y colocarla, colgando, detrás de la puerta de tu hogar. Podés elaborar otra para colocarla en tu sitio de trabajo o en el auto. Proveerá dinero y bienestar.
Ritual de los zapatos
- Toda la ropa destinada a ser donada, colocala en bolsas o cajas decoradas, como si fueran regalos y dejala en la puerta de tu casa. Despojate de los zapatos viejos (para cambiar de camino) y el 1º de enero estrená un par nuevo, diciéndote a vos misma "comienzo un nuevo camino". Este año estará lleno de buenas noticias, dinero y oportunidades que te ayudarán a concretar tus metas.
La importancia de las palabras
"Las palabras abren espacios emocionales e imágenes. No se puede pensar sin palabras", reflexiona Barrera, quien afirma que se deben elegir cuidadosamente las palabras que usamos al hacer un pedido.
"Cuando cambiamos las palabras, cambiamos el estado de ánimo, y cuando cambia nuestro estado emocional, cambia la biología. Nuestra mente inconsciente se programa a través del lenguaje y del pensamiento, pero ¿qué vino primero? Cuando somos niños aprendemos a comunicarnos a través de un lenguaje gestual, luego aparece el pensamiento y el idioma", dice.
"Como pensamos con palabras, comenzamos a aprender frases y dichos que, sin darnos cuenta, son la base de lo que más tarde o más temprano se materializará en nuestra vida. La mente está repleta de creencias, estructuras mentales, paradigmas y mitos, que nos dictan qué es y qué no es real".
Y agrega que "la clave está en lo que nombrás cuando decís algo. Sólo entra a tu vida lo que llamás, si algo falta en tu vida es porque no sabes cómo nombrarlo para que se materialice".
Y concluye: "La clave está en prestar atención a lo que nombrás. Una vez que aprendés a bendecir tu vida (decir bien), dejás de maldecirla (decir mal). Cuando aprendés a utilizar el fin de la palabra, encontrarás la llave que abre, maneja y cambia el tiempo.
El uso de las palabras en la búsqueda de trabajo
- Si digo “mañana voy a buscar trabajo”, lo que estoy diciendo realmente es que no voy a encontrar trabajo, sino simplemente buscarlo.
O cuando manifiesto que “estoy tirando CV por todos lados”, estoy diciendo que nadie va a contratarme porque yo "tiro" los currículums. - Si digo “no me sale ningún trabajo”, estoy manifestando que el trabajo está, pero yo me estoy saliendo.
- Si digo “tiene que salir algún trabajo”, le estoy dando la orden al trabajo para que se salga.
- Cuando expreso “quiero conseguir un trabajo”, lo que realmente digo es que sólo lo consigo y no lo tengo.
