Cuenta con más de 67 millones de reproducciones, con lo cual es uno de los títulos más exitosos de Netflix: Sexo/Vida, cuya primera temporada se estrenó el pasado 25 de junio, escaló a la velocidad de la luz logrando ubicarse en el primer puesto de los contenidos más vistos durante semanas.
Con este trailer, la plataforma de streaming anunció que "muy pronto" llegará la segunda temporada, con una primera parte que terminó con un final abierto que sorprendió a todo el mundo.
Si todavía no la viste, es momento de que lo hagas: una producción, basada en las memorias de la escritora BB Easton, que cuenta con ocho capítulos en los que se aborda la sexualidad femenina.
En cuanto a la historia, al principio, parece una de las tantas que vimos: la protagonista, Billie Connelly (Sarah Shahi) es una mujer con, aparentemente, una vida perfecta. Está -en apariencia- felizmente casada, tiene dos hijos pequeños y se encuentra viviendo en una hermosa casa en un barrio acomodado de Connecticut. Billie lidia con la maternidad reciente y la crianza de dos niños pequeños, mientras su relación se encuentra en una meseta de "acostumbramiento" que no la tiene demasiado satisfecha.
Lo que la atormenta es que, cada tanto, le aparecen flashes de su vida anterior, que era muy diferente de la actual. Ella tenía una carrera profesional que le apasionaba, mientras vivía su sexualidad de manera libre y desprejuiciada junto a un hombre por el que sentía un magnetismo indescriptible.
Su punto de inflexión lega cuando, llena de nostalgia del pasado, decide escribir un diario con sus memorias -sobre todo las de la vida íntima con su ex novio, Brad (Adam Demos)- que se contrapone a la relación bastante más fría y automática que lleva con su marido, Cooper (Mike Vogel). Billie y Cooper se conocieron en un momento en el que ella necesitaba estabilidad y sentirse amada, dos cosas que él pudo brindarle desde que lo conoció: si bien se aman, la rutina, los hijos y los tiempos de familia transformaron la relación de pareja en algo que a Billie no la satisface.
De casualidad su marido accede al diario y descubre sus fantasías y la aborda dispuesto a cumplir con sus fantasías. De aquí en adelante se plantea un triángulo, ya que la presencia de Brad aparece como fantasía entre ambos: para ella, como eso que extraña y no pudo ser. Para él, como su competencia.
Esta presencia se vuelve realidad cuando Billie y Brad vuelven a cruzarse, lo que le producirá una confusión aún más importante.
La serie aborda diversos temas como la amistad, los códigos, los límites, la mirada ajena de lo que se considera una relación idílica, cómo impacta la maternidad y como afecta la condición de mujer, desde una mirada femenina -la de la protagonista- de un modo desprejuiciado y cruento que invita a ver un capítulo detrás del otro.
Sarah Shahi, quien interpreta a la protagonista, contó en una entrevista que estaba nerviosa de asumir un papel tan exigente, porque implicaba desnudos y escenas de alto voltaje pero también expresó que se sintió "segura", ya que el equipo de la ficción estaba formado por mujeres. Su creadora es Stacy Rukeyser, cuenta con varias directoras a cargo de los capítulos, con mayoría de mujeres en el grupo de guionistas. De esta forma, han conseguido dar a esas escenas tan explícitas una mirada genuinamente femenina.
"No me di cuenta de lo genial que era tener mujeres detrás de las cámaras hasta que lo hice. La seguridad que conlleva poder hablar con las mujeres sobre esas escenas sexuales… No sé si me hubiera sentido tan cómoda abriéndome de esa manera si fuera un hombre", explicó Shahi. "Muchas veces, hay series o películas muy sexuales que todavía se cuentan a través de la lente masculina, pero ahora parece estar cambiando", concluyó.
