Se llama Eutopia y es "la silla del 2020". La creó el salteño Francisco Gómez Paz, que recibió el Compasso d´Oro, algo así com "el Oscar del diseño industrial".
Por primera vez una silla diseñada, producida y fabricada en Argentina resulta ganadora de la categoría Diseño para el Habitar del prestigioso premio Compasso ´Oro, que se entregó ayer en la ciudad de Milán, Italia.
Una comisión de expertos integrada por diseñadores, críticos y periodistas del Observatorio Permanente del Diseño de ADI (Asociación de Diseño Industrial) fue la encargada de seleccionar y premiar este bellísima pieza creada por el salteño Francisco Gómez Paz.
“Esta pequeña silla de madera empezó como una utopía, queríamos lograr un producto extraordinario desde Salta, a pesar de no contar con el soporte de un sistema industrial tradicional. Un producto que, soñamos, pudiera ser apreciado por su valor sin tener que disculparse por las dificultades de su lugar de nacimiento. Gracias eternas a todos los que hicieron posible este sueño”, expresó el diseñador.
Francisco Gómez Paz, el diseñador de oro 2020
Francisco Gómez Paz (44) nació en Salta -es hijo de un arquitecto- y se formó en Diseño Industrial en la Universidad Nacional de Córdoba.
En 1998 viajó a Milán, la meca del diseño, para realizar un master en la prestigiosa Domos Academy. "Gracias a eso tuve la suerte de llegar a trabajar con dos de los últimos modernistas que quedaban en la escena del diseño, Paolo Rizzatto y Alberto Meda, dos genios”, recuerda Gómez Paz.
Así fue que abrió su estudio en Milán, comenzó a trabajar para grandes empresas de diseño y a recibir los primeros reconocimientos internacionales.
Gómez Paz ya había recibido un Compasso d´Oro en 2011 por su lámpara Hope para la firma Luceplan, y es uno de los creativos fetiche de esta empresa italiana.
La silla del año se hizo en Salta
Hace tres años Francisco Gómez Paz decidió volver a su terruño y armó un mega taller con tecnología digital en su Salta natal.
Fue el espacio que necesita para darle forma a Eutopia, la silla que no lleva clavos ni tornillos. Está fabricada a partir de cuatro planos de multilaminado con un perfecto sistema de encastres y sus uniones solo llevan cola.
Se fabrica en serie, con corte láser e impresión 3D y es de madera de Paulownia (Kiri) resistente y sorpresivamente liviana: apenas pesa 1,8 kilos y soporta más de 100.
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