El verano trajo un respiro: a lo largo del país, nos volvimos a reencontrar con las vacaciones, con viajar y disfrutar la playa, las montañas, las sierras, los ríos y los buenos paisajes, de esos que abundan en Argentina.
Con la llegada de diciembre, el turismo comenzó a reactivarse y la temporada se vivió a pleno: hasta el momento, según datos del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, viajaron más de 12 millones de argentinos.
Pero el verano no terminó y todavía quedan días para aprovechar. Tanto para los que ya salieron de viaje y aún quieren seguir recorriendo como para los que dejaron para marzo su ansiado descanso, hay opciones de sobra para hacer las últimas escapadas del verano: Buenos Aires y Entre Ríos, cerca, se presentan como grandes alternativas.
Desconectarse en las estancias de Buenos Aires
Las experiencias rurales en la provincia son amplias y diversas, llenas de sorpresas para disfrutar en familia, en pareja o con amigos. Alojarse en una pequeña posada o en una quinta, compartir con una familia rural, dormir en una estancia colonial o descubrir un lugar que combina ecoturismo y turismo rural en el Delta son algunas de las tantas experiencias rurales que se pueden disfrutar a unos pocos kilómetros de Capital Federal.
En las estancias bonaerenses el estrés se convierte en un recuerdo y la naturaleza sorprende a los visitantes en todo momento.
Estancia La Sistina, una opción especial
A La Sistina, en Guaminí, se llega en lancha, ya que se ubica en una isla en la Laguna del Monte. Esto le otorga adrenalina al trayecto y un encanto particular al lugar.
La construcción tiene forma de trébol, paredes con revoques y arcadas mediterráneas, columnas jónicas y tejas coloniales. Además de inmensos ventanales con una vista única hacia la laguna que permiten disfrutar también del amanecer. El ecosistema es único: por allí pasean pavos reales, ciervos, maras y ñandúes dando vueltas cerca del casco. También maravillan los atardeceres y las indescriptibles noches de luna llena.
Además, las aguas de la Laguna del Monte son ideales para realizar pesca desde la costa y embarcada, esquí acuático, wakeboard y hacer kayak. Y los amantes de la naturaleza pueden hacer safaris fotográficos, paseos en bicicleta y caminatas mientras observan la flora autóctona. El plus: la gastronomía es una verdadera delicia con platos abundantes y caseros.
La Rosenda, historia y relax se combinan para una gran experiencia
En Zárate, la Rosenda es una finca en la que conviven la actividad agropecuaria con espacios de relax y diferentes atractivos turísticos.
El casco de la estancia tiene más de cien años de antigüedad y posee un palomar de mediados de siglo XIX, que refleja hábitos y costumbres de la época.
La casa, de estilo colonial, tiene una importante galería con sillones y mesas de apoyo. Además dispone de un segundo corredor con parrilla y horno a leña. Como dato de color, acá se filmó en 1994 la telenovela “Más allá del horizonte”.
Relax entre las termas y el campo entrerriano
La propuesta es cambiar de aire en poco tiempo. Tareas rurales, comidas campestres, travesías a caballo o por el arroyo: las estancias y casonas entrerrianas son un paraíso natural para descubrir costumbres y tradiciones.
Villa Elisa y Colón son solo algunas de las opciones que ofrecen desconectarse por completo. Sentarse a tomar algo en un almacén de campo, saborear un desayuno campero, sumarse a ayudar en las tareas rurales, alimentar a los animales, visitar un clásico almacén de ramos generales, cosechar los frutos de la tierra y cocinar pan casero en grandes cocinas familiares: en conclusión, encontrar el descanso.
Para los más activos, trekking, senderismo, avistaje de aves y exploraciones hacia la naturaleza. La hora de la siesta resulta ideal para dormir un rato o emprender una pequeña travesía en piragua por un arroyo y algunos se quedan allí hasta el atardecer, para ver el ocaso en medio de ese paisaje.
La comida casera es el broche de oro, siempre. Es posible alojarse en estancias y casas de campo, chacras y hasta hospedarse en un vagón en medio del campo.
Las termas, un clásico infalible
No por nada Entre Ríos es la Capital Nacional de los Circuitos Termales: 16 complejos y 14 localidades reúnen más de 125 piscinas con distintas características y propiedades, que se renovaron con los cuidados necesarios que amerita el contexto.
Termas Colón, ubicado al norte de la ciudad, está enmarcado por el campo del Golf Club Colón, la reserva natural de Arroyo Artalaz y el majestuoso río Uruguay. El paisaje que lo rodea le brinda un atractivo a la altura del agua que fluye en sus piscinas, tibia y relajante.
Las Termas de San José cuentan con una zona de relax con hidromasajes y un sector recreativo donde está el Parque Acuático Termal, que permanece habilitado durante todo el año para que disfruten chicos y grandes. Además, ofrece para la recreación, canchas de vóley y fútbol y una laguna termal con animales autóctonos.
Las Termas Villa Elisa tienen una oferta muy completa: spa termal con vista al lago, alojamientos variados en las modalidades de bungalows, hoteles 3 y 4 estrellas y zona de camping; servicios de gastronomía, campo de golf, canchas de fútbol y vóley.
Además, se proponen actividades recreativas dirigidas y posee un lago de 4 hectáreas apto para la realización de actividades náuticas sin motor, como cablewake, botes, kayaks, disfrutando de la naturaleza y apreciando las especies autóctonas.
Termas del Guaychú es un complejo recreativo y de esparcimiento a 8 km del centro de la ciudad de Gualeguaychú. Está inmerso en un predio de 120 hectáreas, de las cuales 80 pertenecen a una reserva natural de monte nativo, en la que se encuentra una rica variedad en especies de flora y fauna.
En las Termas de Gualeguaychú, el relax de las aguas termales se incorpora de manera perfecta con el sector dedicado especialmente a los masajes corporales y el wellness. En la temporada de verano es ideal porque la oferta se complementa con piscinas al aire libre, provistas con toboganes familiares y una plaza acuática para el disfrute de los más pequeños. Está en Pueblo Belgrano, Gualeguaychú.
Finalmente, las Termas Concepción están a la vera de la Autovía General Artigas, a minutos del centro de la histórica ciudad de Concepción del Uruguay. En verano, se puede disfrutar del Parque Acuático Concepción, con toboganes gigantes de 17 metros de altura, piletas complementarias y juegos para los más chicos.
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