Pilar Resta es productora de moda y colaboradora habitual de Para Ti. Se casa en noviembre, y esta es la primera de 5 notas en las que compartirá su experiencia en primera persona.
Me llamo Pilar Resta y estoy a punto de casarme. Quiero contarles todo desde el principio hasta el día de la boda, pasando por el anillo de compromiso, la elección del vestido, la fiesta y cómo me estoy preparando para ese gran día, el 15 de noviembre.
Pero empecemos por el principio… ¡Yo! La que fue, la que quise ser y la que soy, en un momento clave que disfruto vivir y compartir.
Productora de moda “por amor al arte”
Siempre me fascinó el arte, y por eso me dediqué a abordarlo en varias de sus expresiones: música, pintura, dibujo, plástica ¡y moda!
Apenas terminé el colegio, empecé a tomar clases de dibujo y pintura, y estudié Artes Visuales en el IUNA. Después, me dejé llevar por la música, así que estudié Producción de Música Electrónica en la EMBA. Empecé a trabajar como DJ residente en la disco Shampoo, y fui parte de su boom durante dos años. También toqué en Pacha Buenos Aires, hice presentaciones en el interior del país y en Uruguay, en el famoso boliche Lotus.
A los 23, bajé el volumen y me escuché sobre lo que quería de mi vida para lo el futuro… Y ahí fue cuando decidí arrancar con la moda. Estudié un curso en Espacio Buenos Aires, y enseguida me mandé como asistente. Tras dos años de aprendizaje junto a reconocidas productoras de moda, mucha dedicación y algunos buenos contactos, empecé a full mi carrera como productora de moda.
Trabajé en muchas revistas –en Para Ti, por supuesto, y en sus títulos especiales ParaTeens y Novias-, también como vestuarista de tevé y en campañas de publicidad.
Seguro que estás pensando que con todo este background y conocimiento me resultó facilísimo decidir todo sobre mi casamiento: el vestido, los accesorios, la fiesta, la ambientación, el tocado, la música… Pero no!!! Me costó muchísimo y, por suerte, tuve un team de gente increíble a mi alrededor que me ayudó muchísimo. Y así te lo empiezo a contar…
¡Sí, queremos!
Este fantástico proceso que estoy viviendo arranca ni más ni menos que con el tan popular y codiciado anillo que nos identifica como mujeres enamoradas: el “anillo de compromiso”.
Si chicas, en el siglo XXI sigue siendo el símbolo de un momento mágico que da comienzo a una gran etapa de la vida junto al amor de tu vida.
El invierno pasado, con mi novio, Juan, nos fuimos de viaje unos días al sur. Imagínense la escena: él y yo, una tarde juntos, comiendo una exquisita picada y tomando un rico vino en la terraza del Hotel LLao LLao, en Bariloche. Al rato de estar charlando y matándonos de risa, echados en los sillones del bar, cada uno con una copita en la mano y deleitándonos con cordero ahumado patagónico, jamón ibérico, quesos varios y una vista alucinante, me dijo: “Mi amor, esto es un símbolo de mi compromiso hacia vos, de nuestro compromiso juntos, un paso más en este amor que tanto nos une”.
Y así seguimos, disfrutando del amor día a día, y hoy este anillo es la cosa más mágica y romántica que llevo en mí.
Los anillos: el de compromiso y las alianzas
Hay una gran variedad de anillos de compromiso. Mis preferidos son los anillos sin fin o medio sin fin, también conocidos como “eternity”. Pero hay otras opciones, como los solitarios que son muy codiciados.
Con las alianzas, en cambio, hubo toda una revolución últimamente y decidir por un modelo es misión complicadísima.
Hoy en día, no es como antes, y ya no existe la clásica alianza de oro amarillo curvada. Eso cambió y actualmente se puede optar por alianzas de formas súper diferentes: curvadas, planas, con brillantes incrustados, en oro amarillo o en oro blanco.
Me costó mucho elegir las nuestras, y lo más lindo es que lo elegimos los dos juntos, aportando un 50 por ciento cada uno al diseño porque mi novio eligió el color y yo la forma de la alianza. El resultado: dos alianzas en oro blanco curvadas.
Tómense su tiempo para probar y definir, Vayan a varias joyerías (Vian, Bártoli, Oleana Jewelry) y diseñadores. Y si las querés de oro sí o si, tené en cuenta que hay dos formas de hacer el oro: rodinado (baño de rodio) y palladium. Mi recomendación: vayan por palladium ya que hace que el anillo mantenga su color “para siempre”. El rodinado, en cambio, va perdiendo el tono y cada dos años hay que retocarlo.
Es un anillo que vas a llevar toda la vida, así que ¡dedíquenle el tiempo necesario para hacerlo bien!
Continuará: próximo episodio: el vestido (¡!), inspiraciones y estilos, el look del novio, el de tus amigos y el cortejo.
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